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PP: "Navarro suspende el control de tráfico y videovigilancia al no poder pagar el servicio a la adjudicataria"

  • El edil González de Zárate denuncia que la decisión afecta a la seguridad y deja al casco urbano sin control de acceso

El Centro de Gestión Integrado de la Policía Local del Ayuntamiento de Benidorm, un moderno sistema de control del tráfico y videovigilancia, ha dejado de funcionar y ha quedado suspendido porque el gobierno de Navarro es incapaz de renegociar con SICE, la empresa adjudicataria, y de cerrar un plan de pagos para saldar su deuda. Una de las consecuencias más graves de la nueva situación es que también ha dejado de funcionar, desde hoy mismo, el control de acceso al casco antiguo de Benidorm, donde han quedado bajadas las pilonas y los semáforos sólo funcionan en color ámbar y de modo intermitente.

Los hechos han sido denunciados esta mañana por el concejal del Grupo Municipal del Partido Popular, José Ramón González de Zárate, quien ha recordado que los hechos han terminado por dar la razón a las denuncias que el Partido Popular ha venido haciendo desde abril de 2011, cuando dejó de funcionar el control de accesos al casco antiguo. “Lo que ha ocurrido,-dijo-, no es más que el fruto de un nuevo fracaso de Navarro en la gestión pública”.

El edil lamentó que “la desidia y las mentiras de Agustín Navarro haya provocado la desaparición de un nuevo servicio básico para Benidorm, que en este caso afecta a la seguridad, la movilidad y la calidad de vida de los vecinos”. Añadió que este servicio con el cual se elevaba la seguridad de todo el municipio de Benidorm, “nunca ha sido una prioridad para el gobierno de Navarro, un alcalde,-dijo-, que es el principal destructor de empleo, puesto que tres trabajadores se han quedado sin trabajo al suprimirse el servicio”.

El Partido Popular no sólo lamenta la pérdida de puestos de trabajo, sino también que el gobierno municipal socialista haya dejado de utilizar un servicio en el que se invirtieron más de 2 millones de euros y que supuso colocar a Benidorm a la vanguardia de los municipios que recurren a la tecnología más avanzada par regular el tráfico y elevar su estándar de seguridad. “Hacer de Benidorm una ciudad mas segura y eficiente,-explicó González de Zárate-, solo le costaba al Ayuntamiento 8.000 euros al mes, pero este gobierno prefiere gastarse el dinero en otras cosas, como por ejemplo adelantar el dinero del Low Cost sin avales bancarios por parte de la empresa, y con la mitad de ese dinero se habría pagado este servicio de vigilancia y control del tráfico de todo un año”.

Las calles afectadas por la supresión de este servicio de control de accesos en el centro urbano, Casco Antiguo y Calvari son: Perez Llorca, Sol, Pintos Lozano, Paseo de la Carretera, La Biga, La Parra, Tomás Ortuño, Ruzafa y Almendros. El Centro de Gestión Integrado servía para centralizar los sistemas de tráfico, videovigilancia y comunicaciones de la Policía Local. Las cámaras instaladas en los distintos puntos de la ciudad se gestionaban desde este centro de control, cuyo funcionamiento estaba adjudicado a una empresa especializada junto a efectivos de la Policía Local. Recordó y lamentó que el entonces edil de Movilidad, José Bañuls anunciara hace año y medio que iba a formar a funcionarios para ahorrar costes “y no sólo hizo nada, sino que su ineficacia provocó caos de tráfico en temporada alta, cuando dejó de funcionar el control de accesos al casco urbano”.

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