Miércoles Santo en Aspe
La Semana Santa de Aspe vivió anoche uno de sus grandes momentos con la procesión de la Pasión de Cristo que sacó a la calle doce de sus pasos a través de las diez cofradías que participaban en la procesión, de doce con las que cuenta esta festividad declarada de Interés Turístico Provincial, y que anoche, con sus calles abarrotadas de público aspense
y foráneo, dio motivos más que de sobra para alcanzar la declaración autonómica por la que lleva varios meses de gestiones.
Más de 1.500 cofrades se dieron cita anoche en las puertas de la Basílica Nuestra Señora del Socorro, desde donde partía puntual la procesión como cada año. Y es que la del Miércoles Santo es una de las procesiones más antigüas y participativas de la localidad. Con sus orígenes en el siglo XIX, era conocida como la procesión de "recogida de imágenes", pues antaño era la que se encargaba de llevar los pasos que antiguamente se custodiaban en casas particulares hasta la Ermita de la Concepción, desde donde salían la mayoría de las procesiones aspenses hasta la década de los setenta del pasado siglo. Fue ahí, con la evolución propia del paso del tiempo y la llegada de nuevas imágenes que se fueron incorporando, cuando fue adquriendo las características que la definen hoy como un resumen de secuencias que marcan diversos pasajes de la pasión y muerte de cristo, de ahí el nombre con el que fue bautizada hace ahora siete años.
Y es que en ella participaron los pasos de San Pedro, Santa Verónica, Nuestro Padre Jesús Cautivo, Caída de Jesús, San Juan, Nuestro Padre Jesús Nazareno, Dolorosa, María Santísima de la Humildad, Santísimo Cristo del Perdón, Madre Desolada, Nuestra Señora de las Angustias y María Santísima de la Amargura, que recorrieron uno de los itinerarios más extensos de la Semana Santa aspense, regresando los últimos pasos a la Basílica ya entrada la madrugada del Jueves Santo. Aunque este hecho no hizo disminuir la cantidad de espectadores presenciando la procesión en todo el recorrido en la Semana Santa con más público que se recuerda en Aspe según indican los organizadores.
La novedad de la noche vino de parte de la Hermandad del Santísimo Cristo del Perdón, que estrenaba la modificación de su canastilla para pasar a ser portada a costal por primera vez en una procesión de Semana Santa, dejando atrás los varales con los que se portaba el trono desde que la más joven de las hermandades aspenses se estrenara en la Semana Santa de 2007.
