El Consejo Escolar de Aspe recurre al Síndic de Greuges para pedir a la Generalitat el pago de las becas de libros de 2011 y 2012
La presidenta del Consejo Escolar Municipal, María García Artero, reclama una respuesta inmediata de la Conselleria para las familias de los alumnos de primaria y secundaria
El Consejo Escolar Municipal de Aspe, máximo órgano de representación de la comunidad educativa en la localidad, ha presentado una queja ante la Sindicatura de Greuges por los impagos de la Conselleria de Educación a las familias de alumnos que se vieron beneficiadas con las becas de libros escolares. La presidenta del Consejo, María García Artero, señaló que la decisión del Consejo, tomado por unanimidad, se debe a la "desesperación de muchas familias que han sido beneficiadas con becas en el curso 2011/2012 y 2012/2013, pero que a estas alturas del año no han recibido ni un euro de ninguna de las dos convocatorias".
La presidenta del Consejo explicó que la convocatoria de 2011 especificaba que el cobro de la ayuda sería al inicio del curso, aunque nunca se produjo. En la convocatoria de 2012, tanto de primaria como de secundaria, también ocurrió lo mismo, y ninguna de las familias ha disfrutado de la ayuda de la Conselleria para la compra de libros.
"Es una situación perversa, porque muchas familias esperan recibir esta ayuda para pagar los libros. A la vista de los impagos de la Conselleria, las familias tienen mayores dificultades a la hora de realizar las compras, porque dudan del compromiso del Gobierno de la Generalitat", comentó García Artero.
La representante de la comunidad educativa indicó que "esta política descapitalización de la educación pública y del desprestigio que hace el propio Gobierno de los profesionales de la educación pública, es uno de los mayores errores que se pueden cometer contra la sociedad. Está el juego, no sólo el futuro de unos jóvenes, sino el porvenir social de la Comunidad Valenciana y de toda España".
La esperanza del Consejo Escolar es que el Sindic de Greuges responda a la Conselleria y le exija el pronto pago de los retrasos en materia de becas. "Es fundamental que se produzca, puesto que en caso contrario la convocatoria de este año de las becas para libro se va a considerar una burla por parte de las familias". García Artero entiende que la ayuda en materia de libros es "esencial" para que los jóvenes tengan asegurado el principio de igualdad de oportunidades, de libre acceso a la educación y a su libertad de decidir su futuro.
