Un apagón, unos cartones y un balón: la escena que ha devuelto la esperanza en la infancia en parques y calles de la Comunitat Valenciana
Una imagen viral en una ciudad valenciana se convierte en símbolo de un momento irrepetible
La tarde del lunes 28 de abril dejó sin suministro eléctrico a numerosos municipios de la Comunitat Valenciana debido a una incidencia masiva que afectó a buena parte del territorio. Pero más allá del contratiempo, la jornada dejó imágenes que muchos no veían desde hacía años: niños jugando en la calle sin móviles, sin tablets y sin conexión a internet.
Una de esas escenas se ha vuelto viral tras ser tomada en Petrer. En ella se ve a varios niños reunidos en un parque, sin dispositivos electrónicos, rodeados de cartones recogidos de la basura, improvisando un juego con un balón y, sobre todo, con imaginación. El comentario que acompañaba las imágenes lo decía todo: “Del apagón me quedo con esta imagen… Críos jugando en el parque sin móviles, sin tablets, sin internet, solo con unos cartones de la basura, un balón… y su imaginación. Acabo de recuperar la fe en la humanidad”.
Una escena que se repitió por toda la Comunitat Valenciana
La imagen no fue única. Escenas similares se vivieron en numerosos pueblos y ciudades de la Comunitat Valenciana. Con la caída de internet y la imposibilidad de utilizar dispositivos digitales, muchos menores salieron a la calle y redescubrieron el juego tradicional, en grupo, sin pantallas de por medio.
Bancos que se convirtieron en porterías, cartones que fueron castillos o casas imaginarias, piedras como monedas o líneas en el suelo como límites del campo. El apagón, aunque breve, supuso un paréntesis que muchos padres y vecinos observaron con nostalgia y emoción.
El valor de la imaginación frente a las pantallas
Lo que para muchos fue un corte de luz se convirtió para otros en una ventana al pasado. Una oportunidad para que las nuevas generaciones vivieran lo que durante décadas fue parte de la infancia de miles de niños: el juego libre en la calle, con lo que hubiera a mano, sin necesidad de más que un poco de creatividad y compañía.
“Es bonito ver cómo, en cuanto se apaga la tecnología, renace la infancia más pura”, comentaba una vecina de Petrer que también presenció la escena.
Las redes sociales celebran la imagen como símbolo de esperanza
El gesto espontáneo y natural de estos niños ha sido compartido en redes como símbolo de esperanza. En plena era digital, la fotografía ha abierto un pequeño debate sobre el uso excesivo de pantallas en la infancia y el valor del juego libre, la socialización y la imaginación.
Desde Petrer hasta Xàtiva, pasando por Ontinyent, Alzira o Vilamarxant, muchas familias han compartido momentos similares en redes que transformaron un apagón imprevisto en una lección sin palabras: la infancia, cuando se le da espacio, encuentra su propio camino.
