Enrique Montalvá insta al Gobierno Central a que firme un Convenio que tiene pendiente con los agricultores
La finalidad del Acuerdo es tratar de atajar la problemática del robo de naranjas en los campos valencianos mediante medidas como la adopción en todo el territorio valenciano de la llamada guía conduce o guía de Control de mercancías, la cual ya fue implantada en Alzira en el año 2009 siendo esta una medida pionera en la Comunitat Valenciana.
La misma establece que el conductor de cualquier vehículo que transporte cítricos, debe portar dicho documento en el que se especifica el origen y el destino de la carga, de manera que la mercancía que no esté sujeta a ninguna transacción comercial, deberá aportar como mínimo la citada guía, la cual puede ser exigida por la autoridad competente para asegurar que la carga haya sido obtenida de manera legal y con la respectiva autorización del agricultor propietario.
Otra medida que también contiene el Convenio es la puesta a disposición de los agricultores de ubicaciones para poder denunciar con mayor facilidad los robos para la creación de un mapa de delincuencia, facilitando a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como a la policía local, que puedan actuar con mayor diligencia en los principales focos en los que se produzcan este tipo de delitos.
En palabras de Montalvá: “se trata de un Convenio que contiene unas medidas encaminadas a reducir el número de hurtos de naranja, y el Ministerio está retrasando injustificablemente la firma del mismo en perjuicio de nuestros agricultores.”
En la moción, el Concejal Delegado de Agricultura recuerda que la recogida de la naranja comenzará en breve, y que por este motivo urge la aplicación inmediata del convenio, que ya se retrasa un año sin explicación alguna.
Con esta moción, el Ayuntamiento de Alzira pretende contribuir a seguir mejorando las condiciones de la Agricultura en nuestro municipio, tal como se ha venido haciendo desde 2008 con numerosas iniciativas, como el impulso de la firma de un manifiesto en el que se exigía un mayor control de la compra de naranja robada por parte de empresas de zumos, y que fue firmado por la FVMP y los dos principales sindicatos agrarios: AVA-ASAJA y la Unió de Llauradors.
