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Ayer se inauguró en Alzira la exposición “Diseñadores para un mito. Homenaje a Toulouse-Lautrec”

Ayer se inauguró en Alzira la exposición “Diseñadores para un mito. Homenaje a Toulouse-Lautrec”
    Ayer por la tarde se inauguró  la exposición “Diseñadores para un mito. Homenaje a Toulouse-Lautrec”. Al acto de inauguración de la exposición, fruto de la colaboración entre el Ayuntamiento de Alzira y la Fundación Obra Social “La Caixa”, asistió el concejal de Cultura, Carlos Correal.

    Apasionado por el mundo del cartel, Toulouse-Lautrec (1864-1901) recibió encargos de la mayoría de cabarets parisinos. El primer cartel lo realizó en 1891 para el Moulin Rouge. A partir de entonces, y   siempre bajo la influencia de la estampa japonesa, se consagró a la litografía y desarrolló un estilo muy personal en el que también destaca la importancia que adquirió la tipografía en sus diseños. Pese a que su carrera se vio truncada por su muerte prematura, revolucionó el lenguaje del cartel y alcanzó renombre internacional. Influyó en artistas como Beggarstaffs Brothers, Will Bradley, Ramon Casas y Adrià Gual, y sus carteles fueron apreciados por el gran público parisino. Con motivo del centenario de su muerte, el Club des Partenaires du Musée Toulouse-Lautrec de Albi (Francia) hizo un llamamiento en 2001 para homenajear al genial artista. Bajo la dirección de Anthon Beeke, se convocó a cien de los mejores diseñadores gráficos del mundo. El resultado son 100 carteles en los que la impronta de Toulouse-Lautrec se hace patente. Una serie completa forma parte de la Colección Gráfica de la Obra Social “la Caixa”, de la cual ahora se exhibe, en colaboración con el Ayuntamiento de Alzira una selección de sesenta carteles. Bajo el título Diseñadores para un mito. Homenaje a Toulouse-Lautrec, la muestra reúne las visiones de Javier Mariscal, Anthon Beeke, Paula Scher y Ikko Tanaka, entre otros.

    La exposición Diseñadores para un mito. Homenaje a Toulouse-Lautrec, se podrá visitar en la Casa de Cultura de Alzira, del 19 de diciembre de 2008 al 20 de enero de 2009, de martes a viernes de 11 a 13 horas y de 18 a 21 horas y los sábados de 11 a 13.30 horas y de 18 a 21 horas.

    La muestra Diseñadores para un mito. Homenaje a Toulouse-Lautrec está dividida en dos ámbitos. En el primero de ellos encontramos los carteles contemporáneos que hacen referencia a la sugerente personalidad del artista y a toda la iconografía que lo rodea. Bombín negro, bastón y las numerosas apariencias bajo las que Toulouse-Lautrec se dejó fotografiar, han servido como fuente de inspiración a los diseñadores gráficos en su homenaje a este artista.  A continuación, encontramos los carteles basados en el mundo del espectáculo y la noche parisina, de los que Toulouse-Lautrec fue excelente cronista.

    Asimismo la exposición refleja las distintas tendencias contemporáneas del diseño gráfico, ya que reúne obras de diseñadores tan dispares como Javier Mariscal, Isidro Ferrer, Anthon Beeke, Paula Scher, Seymour Chwast, Ikko Tanaka y Alan Fletcher, entre otros. Cada uno de ellos aporta su visión personal de la figura y de la obra de un artista imprescindible para entender la evolución del arte no sólo en el siglo XIX, sino también en el XX.

    El pintor y litógrafo Henri Marie de Toulouse-Lautrec nació en 1864 en Albi (Francia). Descendiente de los condes de Tolosa, fue un personaje encantador dotado de una atractiva personalidad. En 1885, se instaló en Montmarte e inició una vida bohemia; frecuentaba cafés, cabarets, prostíbulos y teatros que reflejó en sus obras. Trabajó para la mayoría de cabarets parisinos, y cultivó la técnica del pastel y la ilustración en revistas humorísticas. El abuso del alcohol le llevó a retirarse a una clínica de Neuilly y, más tarde, al castillo de Malromé, donde murió en 1901.

    Aunque a lo largo de su vida sólo realizó una treintena de carteles, revolucionó el lenguaje del diseño gráfico e impactó de manera decisiva en el desarrollo posterior del mismo. Aportó al cartelismo los colores planos y la perspectiva de la estampa japonesa, introduciendo al espectador como personaje de la escena. También utilizó la tipografía poniéndola en relación con las ilustraciones de forma sorprendentemente rica e imaginativa.

    Si su influencia fue enorme en los circuitos artísticos, sus carteles tampoco pasaron desapercibidos por el gran público. Ya en su época, Thadée Natanson, uno de los fundadores de la revista Revue Blanch, señaló que los carteles de Toulouse-Lautrec brillaban en las calles de París. Cien años después de su muerte, el artista sigue siendo para muchos creadores contemporáneos un ejemplo de libertad intelectual. No en vano son muchos los diseñadores actuales que se sienten sus herederos más directos. La exposición Diseñadores para un mito. Homenaje a Toulouse-Lautrec es un buen ejemplo.  

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