El psicólogo almussafense Salvador Quijal presenta su nuevo libro
El pasado martes 9 de abril por la tarde, la sala de conferencias del Centro Cultural de Almussafes acogió la presentación del libro ‘La insòlita epopeia d’en Joan’, del psicólogo y escritor local Salvador Quijal. Durante el acto, que estuvo presentado por la maestra y directora del CEIP Almassaf Amparo Medina, el autor explicó las motivaciones que le han llevado a escribir esta historia y reflexionó sobre la necesidad de escribir para comprender el mundo. La obra, dirigida a todas las personas a partir de 14 años, cuenta la historia de un joven que descubre que los conocimientos que ha adquirido distan mucho de sus vivencias.
“Plantea muchas preguntas trascendentales que tiempo después de haber leído la historia se quedan dentro, creando un poso interior de filosofía. Puede que no encontremos las respuestas, pero ha tenido el valor de darnos las preguntas”. De esta forma define la maestra Amparo Medina, directora del CEIP Almassaf el libro ‘La insòlita epopeia d’en Joan’, el nuevo trabajo literario del psicólogo almusafense Salvador Quijal.
La sala de conferencias del Centro Cultural de Almussafes acogió el pasado martes 9 de abril, a las 19.30 horas, el acto de presentación de esta obra literaria publicada por Edicions Saragossa dentro de la colección Pere Relats, al que asistieron decenas de personas. En su intervención, Medina puso en valor el libro. “Lo tiene todo, es inesperado, en la historia nada es lo que parece. Encontramos muchos sentimientos en una sola persona y cada vez que pasa algo sabemos lo que piensan los personajes”, señala. En el primer capítulo ya pone sobre la mesa un tema social de plena actualidad como el acoso escolar, “un tema que a Salvador le preocupa muchísimo”, y “propone una manera de entender la vida que puede dar solución a muchas cuestiones”.
Según Salvador Quijal, el objetivo del libro es perfilar utopías. “Nos cuesta imaginar un mundo mejor. Se han creado más distopías que utopías, y eso pasa porque no acabamos de construir un hogar, una casa donde sentirnos confortables”, relata. La novela, que según el psicólogo comunitario puede leer cualquier persona a partir de los 14 años, plantea una sociedad que no se encuentra orientada a la producción de objetos sino a la formación de sujetos. En este sentido, critica que “la tecnocracia domina sobre el humanismo” y que “no hemos crecido en sabiduría ni trabajado en el uso responsable de los bienes”, por lo que la historia nos pone “delante de un espejo” para reflexionar sobre ello.
Sin embargo, no todo son discusiones filosóficas. ‘La insòlita epopeia d’en Joan’, el segundo trabajo literario de Quijal, narra la historia de Joan, un adolescente que huye de su realidad, descubriendo que los conocimientos que ha adquirido distan mucho de sus vivencias, lo que hará que se replantee actitudes y emociones. El autor hace uso de “una fina ironía y una escritura muy cuidada” para explicar sentimientos y pasiones que ayudan al lector a comprender muchas de las situaciones, asegura la docente, quien también ha encontrado en el texto referencias implícitas a obras “que han marcado nuestra vida” como ‘La historia interminable’, ‘Harry Potter’, ‘Charlie y la fábrica de chocolate’, ‘Alicia en el país de las maravillas’ o ‘Un mundo feliz’.
Temas
En su análisis, Quijal, funcionario del Departamento de Bienestar Social del Ayuntamiento de Almussafes, expuso los temas sobre los que se focaliza la historia: el elogio de la vida comunitaria estrictamente social capaz de crear vínculos fuertes entre sus miembros; la búsqueda de paraísos perdidos, frágiles, sutiles y amenazados por los peligros destructores del hedonismo, el consumismo y la competitividad; y la lucha entre el bien y el mal.
“¿Qué sentido tiene escribir hoy en día?”, se pregunta. Hacemos narraciones porque “necesitamos describir la realidad y comprenderla y si hacemos eso es porque estamos insatisfechos, no estamos contentos con el mundo que nos rodea”. En su opinión, “los mundos paralelos nos ayudan a huir de la realidad o nos ayudan a movernos por ella”. “Falta saber cómo la cultura audiovisual afecta a todo esto. Seguramente irá en detrimento del mundo privado y del lenguaje. Sin lengua no hay pensamiento y sin pensamiento no hay desarrollo humano”, augura, sin afán de mostrarse “muy pesimista”.
El autor nos anima a leer el libro porque habla “de un adolescente que se encuentra inmerso en situaciones vitales complicadas en las cuales todos nos podemos sentir identificados”.
