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El Ayuntamiento reconoce a su exjueza de paz con motivo de la concesión de la medalla de bronce del mérito a la justicia

El Ayuntamiento reconoce a su exjueza de paz con motivo de la concesión de la medalla de bronce del mérito a la justicia

    La corporación municipal de Almussafes en pleno acaba de rendirle un homenaje oficial a Dolores Llopis, la primera mujer juez de paz de la localidad y la que más años ha desempeñado su función como mediadora de la sociedad civil. La concesión de la alta distinción en el ámbito judicial por parte del Ministerio de Justicia, a petición del propio Ayuntamiento de Almussafes, de la medalla de bronce de la Orden de San Raimundo de Peñafort, centró el  reconocimiento público, que se le rindió, durante la tarde de ayer jueves, en el salón de plenos del Ayuntamiento. Familiares y amigos de la exjuez de paz, quien ya recibió un homenaje por parte del anterior ejecutivo, con motivo de su cese voluntario a finales del 2014, la acompañaron en el acto de agradecimiento a sus doce años de dedicación a la sociedad civil de la población.

    Durante su intervención, el primer edil, Toni González, constató “el gran orgullo que siente esta institución, todos los que formamos parte de ella y también el pueblo de Almussafes de haber tenido el gran honor de contar con una representante pública del ámbito judicial de la calidad, profesionalidad e impecable trayectoria de Lola”, hechos que la han hecho merecedora de una condecoración de gran valor en el campo del Derecho, como es la medalla de bronce de la Orden de San Raimundo de Peñafort.

    Durante el acto de homenaje público, los portavoces de los tres grupos municipales, PSPV, Compromís y PP, felicitaron públicamente a la exjuez de paz por su labor de excelencia al frente del juzgado de Almussafes desde el año 2012 y hasta el 2014, además de calificarla como de verdadero ejemplo de compromiso y dedicación.

    Aunque el pasado día 13 de octubre, Dolores Llopis recibió la insignia judicial por parte del Ministro de Justicia, Rafael Catalá, en la Subdelegación del Gobierno de Valencia, una alta distinción que, según palabras de la propia exjuez “no estoy del todo segura de merecer, puesto que lo único que he hecho ha sido trabajar de buen grado en aquello con lo que me comprometí y estar al lado de mis vecinos y vecinas para atenderlos cuando lo han requerido”, la que le entregó ayer el alcalde, en representación de todo el ayuntamiento pleno, es la que atesorará en su corazón durante toda su vida, puesto que esta “me la da el Ayuntamiento de mi pueblo, ante mis vecinos y mi gente”, comentó.

    Durante el acto, la primera mujer juez de paz de Almussafes agradeció públicamente el apoyo brindado por todos los equipos de gobierno con los que ha coincidido en el cargo. Asimismo, aprovechó para dedicar la condecoración a su familia, a todos aquellos jueces de paz que la han precedido en el cargo y a los funcionarios y funcionarias del juzgado “que tanto me ayudaron y me enseñaron”.

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