El belén monumental d’Antonio Sallent, uno de los principales alicientes de las Navidades de Almussafes

El belenista particular de Almussafes, Antonio Sallent, vuelve a presentar estas Navidades un conjunto navideño, integrado por casi 400 figuras, que recrean mediante 19 escenas los momentos más importantes en torno al nacimiento de Jesús de Nazaret. Tanto los vecinos de la localidad como todos aquellos visitantes que así lo deseen van a poder descubrir, en un recorrido guiado, esta joya belenística en cuya creación se han invertido más de 3.000 horas de trabajo. El belén va a estar abierto al público próximo día 7 de diciembre y hasta el mismo día de Reyes, en horario matinal y vespertino.

Por segundo año consecutivo, el Consistorio de Almussafes colabora con el belenista particular y vecino de la población, Antonio Sallent, en la presentación al público de este gran montaje, en el que el creador del Belén y miembro del Grupo de Amigos Belenistas, ha dedicado varios años de su vida y una inversión económica nada desdeñable.

El belén se emplaza en un local situado en la Ronda Historiador Lluís Duart Alabarta, número 20 y va a permanecer abierto todos los días, desde el 7 de diciembre hasta el 6 de enero del próximo año, excepto los días 24, 25 y 26. Para poder disfrutar del belén es imprescindible hacer una reserva previa al teléfono 660474354, puesto que se trata de un recorrido guiado de 40 minutos de duración, para el que se limita el grupo a un máximo de 12 personas por visita. Se han establecido tres pases por la mañana (a las 11, 12 y 13 horas) y cinco por la tarde (a las 16, 17, 18, 19 y 20 horas). “Las pasadas Navidades tuve el placer de recibir a más de 2.000 personas y para mi representó un orgullo que pudiesen contemplar esta obra de arte en la que he depositado tantas horas de investigación, búsqueda y posterior clasificación, un proyecto que tiene una continuidad en el tiempo, puesto que resurge cada año”, afirma Sallent.

Figuras que cobran vida
El conjunto belenístico cuenta, en la actualidad, con más de medio millar de piezas, puesto que a las 350 figuras humanas y de animales, hay que sumar otras de complementos y elementos de todo tipo, que parecen cobrar vida enmarcadas en una escenografía arquitectónica espectacular. De hecho, los visitantes van a poder realizar un viaje cronológico que va desde la Sinagoga – Pueblo de Nazaret, hasta la ciudad Santa de Jerusalén, donde Jesús - ya con 12 años de edad - se dirige en el Templo a los Doctores de la Ley. Un total de 19 escenas, ambientadas con diálogos y música y con cuidados juegos de luces, narran la historia del nacimiento de Jesús que empezó a gestarse hace 2.000 años, puesto que la obra arranca algún tiempo antes, cuando María y José todavía no se habían desposado, continua en Belén con el alumbramiento de María, y relata su viaje a Egipto, donde se vieron obligados a huir para eludir las amenazas del Rey Herodes.

Si el pasado año, el conjunto belenístico ocupaba una superficie de unos 45 metros cuadrados, el nuevo montaje se ha ampliado en tres metros cuadrados más, puesto que se han incorporado numerosas novedades. “Hemos elevado el templo de Jerusalen medio metro para incorporar una nueva vivienda con proyección hacia el interior, además de adquirir 30 figuras fijas nuevas y otras 8 de movimiento, estas últimas del escultor murciano Galán, especialista en piezas eléctricas, que hemos integrado en la serie del mercado”, comenta el creador del Gran Belén.

Un sueño hecho realidad
Aunque la pasión de Sallent por los belenes se despertó hace más de quince años, viviendo etapas de participación y colaboración en diferentes montajes, su verdadera dedicación como apasionado belenista se inició en el año 2009, cuando empezó a adquirir piezas a escultores españoles de reconocido prestigio y reconocimiento nacional e internacional. La búsqueda incansable de las mejores figuras para la creación de este conjunto belenístico monumental se sucedió durante más de dos años, hasta completar el montaje que se presenta en Almussafes por segunda vez estas Navidades, el cual está integrado por piezas de José Luís Mayo Lebrija, así como por creaciones de los escultores Daniel Alcántara, Miguel Ángel Oviedo y Galán, todas ellas dotadas de un tratamiento muy realista, tanto en sus rostros y actitudes, como en el movimiento de las telas, en el interés por el detalle y en el acercamiento a las costumbre de la época de Jesús de Nazaret.

El esfuerzo de Sallent ha contado en todo momento con la colaboración de Rafael Alberola, quien se ha encargado de la instalación eléctrica y del montaje de la estructura que sustenta el belén, así como del modelista, Pepe Gil, y de otros tantos especialistas que han brindado sus conocimientos pictóricos y ceramistas para completar la obra.