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Almassora reordena el tráfico del entorno del grupo Pío XII

Almassora reordena el tráfico del entorno del grupo Pío XII
  • Urbanismo ejecuta una rotonda que permitirá distribuir con garantías la circulación

El Ayuntamiento de Almassora reordenará el tráfico del entorno del grupo Pío XII con la construcción de una rotonda que ayude a distribuir la circulación que transita por la zona. El alcalde de Almassora, Vicente Casanova, y el concejal de Urbanismo, Enrique Brisach, han visitado recientemente el entorno con el objetivo de conocer el avance de los trabajos que posibilitarán la mejora de la circulación rodada por la zona.

La nueva rotonda se establece en la confluencia de las calles Valencia y Joaquín Gallego, en un entorno que enlaza el área residencial del grupo Pío XII con el sector industrial del polígono Mijares. “En este punto confluyen seis calles, por lo que se requería una actuación que mejorara el paso por esta intersección”, ha considerado el regidor delegado del área de Policía Local, Luis Martínez.

La actuación supondrá no sólo la apertura de esta nueva rotonda, “cuyas obras se ultiman en la actualidad”, tal y como ha concretado Brisach, sino que además también se “amplía el espacio de la acera para canalizar el tráfico rodado de modo que las curvas se suavicen”. Una obra que está previsto que concluya este mes de julio y que se suma a las obras de mejora de aceras que se han desarrollado en el entorno de este grupo residencial de viviendas, ha destacado el concejal.

Por un lado reordenamos este punto concreto, manteniendo la calle Valencia con doble sentido de circulación como salida natural del grupo Pío XII. Por otro lado, logramos mejorar el paso de los peatones por las aceras, de forma que las condiciones de este punto de nuestra localidad corrijan las deficiencias que registraba para ofrecer un mejor servicio a los ciudadanos”, ha considerado Brisach.

Cabe señalar que el grupo Pío XII ha sido objeto de un plan de accesibilidad programado en el marco del FEIL (Fondo Estatal de Inversión Local). El objetivo ha perseguido la reparación de varios tramos de acera con la demolición de la solera existente y su sustitución por una acabada con pavimento hidráulico adecuado para el tráfico peatonal. En la práctica, la actuación se ha desarrollado sobre una superficie de 2.600 metros cuadrados ejecutada en un plazo de actuación de cuatro meses.

La actuación, que desarrolla la firma Moar Urbana por un importe de 109.640,88 euros, “aplica una de las metas que ha regido cada una de las cinco propuestas urbanísticas proyectadas en el marco del FEIL. En definitiva, posibilitar la accesibilidad de los pasos peatonales, de modo que todos nuestros vecinos con movilidad reducida puedan disfrutar de las mismas”, ha manifestado Brisach.

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