Almassora sitúa en el siglo XIV su devoción por Sant Antoni para apoyar la declaración de Fiesta de Interés Local

Almassora profesa su devoción por Sant Antoni desde el siglo XIV. Así lo atestigua el informe elaborado por el historiador e investigador local Primitivo Garcia i Pascual que da por segura la tesis de la existencia de esta fe profesada por los vecinos a la figura del Santo y a la que se suman dos constancias documentales: una del siglo XVI y otra del siglo XVIII.

Esta es la tesis que sostiene el informe histórico encargado por el Ayuntamiento de Almassora con el objetivo de justificar ante la Generalitat Valenciana la solicitud de declaración de Fiesta de Interés Local reclamada para este festejo tan arraigado. “El documento lo encargamos el pasado mes de enero, después de que los vecinos de la citada calle nos trasladaran su deseo de que la fiesta obtuviera el título otorgado por el Consell al objeto de poner en valor el festejo”, ha señalado la regidora de Cultura, Nuria Felip.

Dicho y hecho. Cultura encargó la emisión del informe y, por su parte, el delegado de Policía Local, Luis Martínez, solicitó el correspondiente informe que justificara, a modo de fotografía, la envergadura que cada año registra esta celebración en el entorno del casco antiguo.

Por lo pronto, el consistorio ya ha obtenido el primero de los informes que sitúa en el 5 de mayo de 1569 el primer hito documentado de la advocación al Santo. Según reza el informe, la población recibió la visita pastoral de Luci Mas, en nombre y representación del obispo de Tortosa, Martí de Cordova, donde se relata “que hay un beneficio (cargo erigido a perpetuidad, con los deberes y los servicios correspondientes, al que va anexa una renta) dentro de la parroquia anterior a la a que ahora se conoce, con un altar dedicado a Sant Antoni y a Sant Francesc”.

Asimismo, el informe histórico también reconoce que en el siglo XVIII “ya nos aparece esta fiesta de calle junto a otras de la Vila. Así, el 1770, en nombre del rey Carlos III, el conde de Aranda solicita información sobre las fiestas de cada corregimiento, división administrativa de la época, y sus gastos. El alcalde mayor de Castellón, corregidor de nuestra demarcación, traslada la petición a nuestra Vila. El justicia, regidores y diputados de Almassora tramitan un Memorial haciendo constar las cofradías y otras instituciones que en esa época celebran fiestas en Almassora y sus gastos”.

Cabe señalar que en este último documento reflejado en el informe histórico encargado por Cultura ya “vienen las trece calles de Almassora, entre las que se encuentra la de Sant Antoni, que hacen fiesta. Cabe remarcar la importancia de la referencia a la capilla como centro de la fiesta, y las diferentes advocaciones, en la fiesta y en la misa con sermón que se hace el día del Santo, al coste de las fiestas y que todo se paga con las aportaciones de los clavarios y con las mínimas limosnas que ellos mismos recaudaban”.

25 años de participación

En opinión de Garcia i Pascual, la tradición de Sant Antoni en Almassora “tiene hoy un claro renacimiento con una participación multitudinaria, consecuencia de la conformación festiva actual, que hará 25 años la próxima edición; siendo la fiesta más popular y participativa del calendario festivo de Almassora, a excepción de las fiestas mayores de mayo y octubre”.

Unas bodas de plata que “esperamos festejar con esta declaración que parte de los propios vecinos y que hemos decidido tramitar a fin de poner en valor esta celebración tan tradicional y arraigada”. En opinión de Felip, “el acuerdo plenario del pasado 11 de febrero dio carácter formal a esta solicitud cuyo expediente esperamos tramitar ahora con diligencia para que el Consell responda a la mayor brevedad posible”.