La lluvia inunda el pabellón B de La Garrofera reformado por el PSOE hace menos de un año

El pabellón B del polideportivo La Garrofera de Almassora se convirtió ayer en una piscina obligando a los deportistas a suspender entrenamientos y modificar horarios en una instalación reformada hace menos de un año con una inversión que supera los 260.000 euros.

“Los deportistas, tanto aficionados como federados, están cansados de sufrir continuas incidencias. Quieren un pabellón polideportivo nuevo, definitivo, adaptado a sus necesidades y dimensionado para la práctica de las disciplinas que se practican en nuestro municipio”.

Paco Soriano, concejal del PP en Almassora, se hacía ayer eco de una situación “que lamentablemente no es nueva”. “Se repite con cada episodio de lluvias porque se parchea una instalación que data de los años 80 y la problemática estructural se evidencia con cada temporal”.

La urgencia de un pabellón polideportivo en Almassora no es nueva. El PP la lleva reclamando desde hace más de media década “e incluso era uno de nuestros objetivos de campaña”. “Lo reclamamos durante el mandato 2015-19 y hoy, pasados seis años, seguimos haciéndolo. Porque con una población que supera los 26.000 habitantes no es de recibo contar con una instalación que se ha quedado obsoleta y limitada para las necesidades que nuestros deportistas requieren”, estima el regidor.

En este sentido, y tras las lluvias registradas este jueves, “desde el PP seguimos reclamando este proyecto”. “El pabellón B se ha reformado con 260.000 euros a través de la Conselleria de Educación y a ella se han sumado diversas obras de refuerzo que superan los 60.000 euros por parte del ayuntamiento. Y los problemas persisten. Es urgente, lo era ya hace seis años, proyectar un nuevo polideportivo. El deporte de Almassora no puede esperar más”.