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El Consell reserva más de 354.000 euros para derribar el Grupo B en Almassora

El Consell reserva más de 354.000 euros para derribar el Grupo B en Almassora
  • Concluye el proyecto de demolición que generará 4.000 toneladas de residuos

El conseller de Vivienda, Rubén Martínez Dalmau, ha confirmado hoy a la alcaldesa de Almassora, Merche Galí, y la concejala de Territorio, Carmina Martinavarro, la reserva de más de 354.000 euros en los presupuestos de la Generalitat Valenciana de 2020 para el derribo del edificio 167 de la avenida José Ortiz. No en vano, la administración autonómica ha concluido este verano el proyecto de demolición que guiará los trabajos y que saldrá a licitación con cargo a las cuentas autonómicas.

Tal como figura en el documento, los trabajos se extenderán durante varios días, en los que el edificio estará rodeado por una valla no menor a dos metros. Antes de la demolición, una visita de inspección recorrerá todas las dependencias para comprobar que no existe ningún almacenamiento de combustibles o sustancias peligrosas y se retirarán o protegerán los elementos urbanos y el mobiliario público con riesgo de deterioro.

El proyecto de derribo supera los 354.000 euros con unas medidas de seguridad extremas que incorporan también la recogida, traslado y tratamiento posterior de las más de 4.000 toneladas de residuos que generará la demolición. Los trabajos están desglosados en: estructura, fachadas y particiones, instalaciones y equipamientos, cubiertas y revestimientos. El contrato incluirá además un capítulo de desvíos y reposiciones, la gestión de residuos y seguridad y salud de trabajadores y ciudadanía.

Martínez Dalmau ha trasladado su “compromiso irrevocable” de derribar el bloque de 38 viviendas, como era voluntad de su antecesora en el cargo, la exconsellera María José Salvador, para atender la petición vecinal de Almassora. Además, y tal como se comprometieron Salvador y Galí en su día, el derribo de este edificio no conllevará nuevas edificaciones sociales en este ni en otro terreno.

“Queríamos conocer de primera mano que el Consell, pese a los cambios en los órganos de gobierno en la nueva legislatura, mantiene su intención de derribar el edificio y así nos lo ha trasladado personalmente el conseller, un mensaje tranquilizador que agradecemos, de manera que la iniciativa se mantiene: el bloque irá al suelo y no habrá nuevas viviendas sociales a cambio”, ha ratificado Galí a la salida de la reunión con Martínez Dalmau.

Por este motivo, la Entitat Valenciana d’Habitatge i Sòl ya dispone del proyecto de demolición para el edificio de 759,41 metros cuadros ubicados en una parcela con una superficie total de 2.421 metros cuadrados. El edificio formaba parte de un conjunto de 94 viviendas de promoción pública que se componía de cinco unidades independientes, de las cuales se demolieron tres y quedan dos. Consta de planta baja y cuatro alturas, todas destinadas a vivienda.

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