El Ayuntamiento de Almassora coordinará los trabajos de retirada de las palmeras afectadas por el picudo rojo

El Ayuntamiento de Almassora coordinará los trabajos para retirar las palmeras afectadas por el picudo rojo de modo facilitando las gestiones a sus vecinos. “El objetivo es que los propietarios nos transmitan la ubicación de las palmeras afectadas antes de que éstas sean cortadas y, desde el consistorio, nos pondremos en contacto con la Conselleria de Agricultura para formalizar un calendario de recogida de los ejemplares que comunicaremos a los titulares”.

José Martínez, regidor de Servicios Públicos, ha hecho estas declaraciones de acuerdo al protocolo establecido en el consistorio y que ha coordinado a su departamento con el de Sostenibilidad, dirigido por Enrique Brisach. “El objetivo es que el servicio de recogida que presta la Administración autonómica se desarrolle de forma práctica, diligente y eficaz, y que el ciudadano obtenga una respuesta rápida y una cita concreta para que su ejemplar afectado sea retirado”.

Así las cosas, tal y como han señalado desde ambos departamentos, el vecino que posea una palmera afectada deberá contactar con el consistorio para que éste le facilite una fecha para retirar el ejemplar antes de que éste sea talado. “Desde el departamento de Sostenibilidad se contactará con la Conselleria de Agricultura a quien se le transmitirá el caso y ésta facilitará una fecha y hora que comunicaremos al interesado”, ha detallado Martínez.

“El objetivo es que la eliminación de estos ejemplares afectados por la plaga del picudo rojo sea eficaz y ágil”, ha indicado el titular de la cartera de Servicios Públicos. Una afección contra la que el consistorio lucha desde hace meses con tratamientos para frenar la dispersión del insecto que, por lo pronto, ha afectado a dos palmeras de titularidad municipal, “una en el entorno de Darremur y otra en la plaza Rey En Jaume”, ha indicado el titular de la cartera.

Cabe señalar que, tal y como señalan desde el departamento de Sostenibilidad, en 2009 la propagación de la plaga ha registrado una auténtica explosión, “tanto por la extensión como por la virulencia y rapidez con la que ataca a las palmeras”.

Llamar antes de cortar
Cabe señalar que los propietarios de palmeras afectadas tienen la obligación de cortar la palmera y retirar los troncos. Para facilitar su retirada, el tronco se ha de cortar en trozos de un máximo de 2,5 metros y dejarlos de modo que se puedan cargar con un camión pluma. Las palmas también se han de dejar recogidas y apiladas. “La comunicación al consistorio se debe producir antes de talar la palmera y contactar con el departamento de Sostenibilidad”, ha indicado el titular de Servicios Públicos.

Cabe señalar que la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación ha publicado en el DOCV del pasado 8 de enero una nueva regulación por la que se establecen las medidas fitosanitarias obligatorias para el control y la erradicación de la plaga del picudo rojo. “Por parte del Ayuntamiento, perseguimos poner freno a la dispersión de la larva y el consecuente contagio de nuevas palmeras con la aplicación del tratamiento distribuido por la Administración autonómica”.

Cabe señalar que Almassora posee un censo de palmeras municipales de tipo canario, las únicas que resultan afectadas por esta larva, que cifra en 33 los ejemplares. Por áreas, la plaza Jaume I cuenta con ocho piezas; el paraje de Santa Quitèria, en la rotonda situada frente a la ermita, existen dos palmeras; el jardín público de la zona de Darremur posee doce palmáceas; la ermita del Roser luce seis ejemplares; y, por último, en el Auditori municipal Les Boqueres son cinco las Phoenix Canariensis que alberga el recinto municipal.