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Almassora adjudica a Jujosa la remodelación de la calle San Salvador por un importe de 350.000 euros

  • La actuación, que se contrata con una baja superior a los 50.000 euros, actuará también sobre las calles San Ramón, San Pascual y un tramo de la avenida José Ortiz

Almassora ha dado un paso definitivo para avanzar en la materialización de las obras de remodelación de la calle San Salvador y adyacentes que el consistorio programó el pasado año con el deseo de ejecutar las obras a partir del último trimestre de este ejercicio. El Ayuntamiento de Almassora adjudicaba con carácter definitivo y por decreto de alcaldía la semana pasada la contratación de las obras que ejecutará, finalmente, la firma Jujosa.

El proyecto, que salió a subasta por un importe de 416.083,16 euros el pasado mes de agosto, se ha contratado finalmente por un importe de 349.211,63 euros, “lo que en la práctica ha supuesto una rebaja superior a los 50.000 euros frente a la previsión presupuestaria prevista”, ha señalado el regidor de Urbanismo Enrique Brisach. Una inversión “destacada” que se ha adjudica después de estudiar y revisar las plicas presentadas por once empresas “que el pasado septiembre pujaron por ejecutar el proyecto”.

El titular de la cartera de Urbanismo ha destacado la relevancia de un trámite que agiliza la materialización de un proyecto que prevé un plazo de ejecución de cuatro meses para desarrollar un profundo cambio urbanístico en cuatro calles: San Salvador, San Ramón y dos tramos de la calle San Pascual y la avenida José Ortiz.
La calle San Salvador, enclavada entre San Ramón y la avenida José Ortiz, reducirá su calzada en favor de los peatones que verán ampliadas sus aceras a lo largo del recorrido. “Actualmente la vía tiene doble sentido de circulación. Sin embargo, el objetivo es limitar el paso de los vehículos a un único sentido para favorecer la ampliación de corredores peatonales que permitan un paso desahogado de los ciudadanos. “Con ello logramos establecer una acera de más de dos metros dotada de arbolado y una segunda que, si bien no dispondrá de árboles, sí incrementará sus dimensiones en beneficio de los ciudadanos”.

Asimismo, el consistorio contempla la remodelación de los tramos de vía que completarían el perímetro administrativo: la calle San Ramón, entre Caridad y Trinidad, un tramo de la calle San Pascual, así como la avenida José Ortiz, entre la plaza Pere Cornell y Trinidad. De acuerdo al plan definido por el departamento de Urbanismo, la actuación contemplará la instalación de un nuevo punto de recogida selectiva de residuos que estará soterrado. “El objetivo es caminar hacia este tipo de servicios enterrados, mucho más prácticos, que generan un menor impacto y que ofrecen una carga de recogida suficiente para el entorno”.

A esta nueva isla de contenedores soterrados, que se ubicará en el arranque de la calle San Pascual en su cruce con la avenida José Ortiz, se sumarán espacios para los depósitos de recogida de residuos sólidos urbanos, que se instalarán en la calle San Salvador, avenida José Ortiz y calle San Ramón. Asimismo, se crearán espacios para el descanso, el juego y el ocio, “ya que ampliamos de forma considerable las dimensiones de las aceras, de modo que se obtienen nuevas dotaciones para el peatón”. Éste será el caso de la glorieta que actualmente se sitúa frente a la fachada posterior del edificio El Mercado. La rotonda desaparece en beneficio de la acera que se amplia hasta crear un punto de descanso cargado de arbolado y donde se instalarán bancos y un área de juegos para los más pequeños.

Apoyo de la Diputación Provincial

La obra adjudicada la pasada semana en Almassora contará con la financiación parcial de la Diputación Provincial de Castellón a través de los Planes Provinciales de Cooperación a las Obras y Servicios de Competencia Municipal. Se trata de una actuación “de calado”, puesto que se persigue dar continuidad al Plan de humanización de la ciudad que el equipo de gobierno del Partido Popular puso en marcha en el ciclo 2003-07 y que ha continuado durante el presente mandato.
Nuestra intención es avanzar en la renovación y accesibilidad de esta vía que forma parte de la trama urbana del centro administrativo y comercial con el objetivo de que en 2011 este núcleo esté adaptado a las necesidades del peatón”, tal y como ha indicado el regidor de Urbanismo, Enrique Brisach.

Un objetivo que el equipo de gobierno completará a finales del próximo ejercicio con la ejecución de la remodelación y adaptación de la calle León XIII y un tramo de la calle Santa Cruz. Se trata de “completar el perímetro de nuestro casco urbano e ir ampliando este plan urbanístico a otros puntos de la localidad, como es el caso de las obras que estamos desarrollando en las calles Colón y San Jaime, o hemos ejecutado en el entorno de Boqueras, San Fernando y en el grupo Pío XII”.

Nos proponemos crear un espacio abierto a los peatones, cómodo para el paseo y seguro para los ciudadanos”. Unas premisas que el departamento que dirige Brisach aplica en cada una de las actuaciones que desarrolla en la localidad y que tiene por objeto establecer un modelo urbanístico “más humano y adaptado a las necesidades de nuestros residentes”. En definitiva, “desarrollar un tipo de ciudad accesible y adaptada”, ha declarado el edil.

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