La estación de Luceros del TRAM de Alicante acoge la muestra fotográfica “De lo pequeño a lo grande”

La estación de Luceros del TRAM Metropolitano de Alicante acoge desde mañana y hasta el día 14 la exposición fotográfica “De lo pequeño a lo grande”, que cuenta con el apoyo del proyecto “Un universo para que lo descubras” y la importante aportación de los investigadores del Centro de Astrobiología.

La muestra se enmarca dentro de las actividades de Street Alicante Science (StAS) que tiene lugar estos días en Alicante y que nace gracias al impulso y la motivación de prestigiosos científicos con el fin de transmitir sus conocimientos de una forma diferente para que todo el mundo disfrute y alcance un contacto intenso y directo con la ciencia.

StAS es un evento sin precedentes en la provincia de Alicante en el que la ciencia “sale a la calle” representada de diferentes formas y actividades en un escenario global. StAS pretende transformar la provincia de Alicante en el mayor acontecimiento relacionado con la ciencia y tecnología de toda España, ya que durante quince días se suceden propuestas para interactuar y disfrutar de nuevas experiencias destinadas a entretener, inspirar y aumentar conocimientos científicos.

StAS cuenta con la colaboración de las dos universidades públicas alicantinas, el Ayuntamiento y la Diputación en el ámbito de la comunicación social de la ciencia y está dirigida al público en general, especialmente a educadores, científicos, divulgadores, medios de comunicación, empresas y colectivos culturales.

Mezclar imágenes
En este contexto, el planteamiento de “De lo pequeño a lo grande” es mezclar imágenes del vasto universo y de las cosas más imperceptibles para causar en el espectador una reacción visual. De hecho, el asombro y el vértigo que siente el ser humano ante lo más grande y lo más pequeño generan en él una curiosidad inexplicable. Esa curiosidad le lleva a preguntarse por aquello que sobrepasa los límites del mundo que conoce a través de los sentidos.

Por ejemplo, hoy en día, se han construido telescopios tanto en tierra como en el espacio que muestran cómo son las estrellas, galaxias, nebulosas, etcétera. Se sabe que las distancias y tamaños en el universo son tan grandes que superan la capacidad del ser humano de comprenderlos y, así, una noche estrellada te empequeñece.

Curiosamente, en el extremo opuesto, pensar en lo más pequeño no hace al mismo ser humano sentirse grande. El mundo de los objetos diminutos parece que no existe porque no se ve, y sólo cuando se construyeron los primeros microscopios se pudo descubrir un mundo fascinante, poblado de células, bacterias, virus, moléculas e incluso átomos... El mundo invisible es tan infinito y fascinante como el universo y aunque, por el hecho de no poder verlo, cuesta imaginarlo y comprenderlo, es un reto acercarnos a la grandeza de lo pequeño.

De esta forma, en la exposición se puede apreciar la diferencia de tamaño entre un microscopio de efecto túnel que cabe en la mano hasta un microscopio electrónico de transmisión de varios metros. Asimismo, se puede apreciar la diferencia entre las imágenes del nanomundo, con átomos, moléculas y células invisibles a primera vista, a grandes planetas como Marte o la relación entre la Tierra y la Luna.