El Consejo Social de Alicante arranca con el Plan de Competitividad como tarea prioritaria
La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, ha dado hoy por constituido el nuevo Consejo Social de la ciudad, órgano de reflexión estratégica de la ciudad que se ha marcado como gran prioridad la puesta en marcha del Plan de Competitividad Alicante 20 20. “Con el Plan de Competitividad que hemos comenzado a diseñar establecemos un horizonte temporal hasta 2020 que supone alinear la estrategia urbana de Alicante con la de la Unión Europea y su propia estrategia Europa 2020, así como adecuarla al periodo de gestión de los fondos europeos 2014-2020, en los que Alicante se posicionaría de manera adecuada para afrontar el futuro”, ha resaltado la alcaldesa, quien ha pedido “colaboración y lealtad” a los miembros del Consejo porque este plan se entiende como “un proyecto de toda la ciudad, un plan de consenso que nace desde la participación e implicación de todos los agentes sociales”.
Sonia Castedo ha explicado que las ciudades compiten hoy por todo, por atraer turistas, por atraer inversiones, por tener las mejores infraestructuras, por disponer de los mejores comercios. “Y debemos planificar una estrategia para competir en las mejores condiciones posibles”, ha remarcado.
A modo de reflexión inicial, este Plan de Competitividad va a abordar, al menos, los siguientes aspectos:
Nuevo impulso empresarial para la generación de empleo; que permita mejorar la actividad económica y empresarial de la ciudad, así como reducir las tasas de paro en Alicante.
Consolidación de un modelo turístico diferenciado; estableciendo una estrategia coherente y específica de la ciudad de Alicante, con el objetivo de incrementar su atractivo como destino.
Apuesta por una internacionalización relevante; determinando los agentes con los que debe relacionarse la ciudad, el papel que debe jugar Alicante en España y en el mundo y el público objetivo al que debe dirigirse (inversores, turistas, etc.).
Fortalecer la función de capitalidad de la provincia; de forma que la ciudad de Alicante ejerza el liderazgo sobre el entorno y se constituya como el elemento tractor clave para el impulso de la provincia.
Establecer una ventaja competitiva sostenible respecto de nuestro entorno; de forma que Alicante identifique aquellos aspectos que le diferencien de su entorno y le posicionen para competir por financiación y recursos.
Diseñar una estrategia de financiación óptima para el futuro; estableciendo los mecanismos de financiación necesarios para acometer las transformaciones que Alicante requiere a medio/largo plazo.
Y, por último ser conocidos y reconocidos (nacional e internacionalmente); para que a Alicante sea una ciudad visible y atractiva para terceros. La singularidad geográfica y estratégica de Alicante nos debe implicar y comprometer a trabajar más allá de nuestra ciudad y de nuestro país, reforzando el desarrollo local mediante la actuación conjunta con otras ciudades de otros países atrayendo inversión con alto valor añadido.
La primera fase del Plan de Competitividad, el diagnóstico actual de la ciudad, se ha encomendado a un equipo interdisciplinar con gran experiencia en internacionalización de ciudades y elaboración de planes de competitividad. Una vez se disponga de ese documento, a finales de mayo, el concejal de Fomento y Empleo, Carlos Castillo coordinará las mesas sectoriales de debate para ir trazando las líneas de actuación del Plan. Todas las propuestas serán trasladadas y debatidas oportunamente por el Consejo Social.
Durante el Consejo, al que han asistido como invitados el Subdelegado del Gobierno, Alberto Martínez; el Delegado del Consell, Juan de Dios Navarro; y representantes sectoriales (turismo, industria, comercio, OAMI, Aeropuerto, etc) de la ciudad, han intervenido miembros de grupos políticos municipales, un representante de la Cámara de Comercio (Andrés Sevila), el presidente de Coepa (Moisés Jiménez) y un representante de UGT. También han tomado la palabra tres de los profesionales de reconocido prestigio del Consejo: Manuel Desantes, Alfonso Ramón-Borja e Iván Sempere. Todos ellos han respaldado el Plan de Competitividad y se han comprometido a contribuir con su trabajo para encaminarlo a buen puerto.
