Alcalà-Alcossebre reparte botellas para limpiar la orina de las mascotas y conciencia a la ciudadanía para recoger los excrementos

El Ayuntamiento de Alcalà-Alcossebre ha presentado hoy la nueva campaña “Areplegamarrons”, con el fin de conseguir la máxima concienciación ciudadana para evitar la presencia de excrementos y restos de orina de mascotas en la vía pública. La campaña pretende llegar a todos los sectores de población. Por eso, se han colocado banderolas en las farolas para recordar que la orina daña gravemente el mobiliario y se reparten trípticos –en valenciano, castellano e inglés- en los que se insiste en que, para conseguir un municipio más limpio, es necesaria la implicación de todos y evitar que se depositen los restos en la vía pública. Además, desde el consistorio se repartirán gratuitamente botellas reutilizables que se pueden rellenar de solución desinfectante para limpiar el espacio de la vía pública sobre el que la mascota ha orinado. Las botellas cuentan con un mosquetón para que puedan acoplarse a la correo del perro, facilitando así su transporte. Las botellas pueden recogerse en el Ayuntamiento de Alcalà y Oficinas Municipales de Alcossebre.  Toda la campaña se ha realizado con materiales sostenibles, papel reciclado en el caso de los folletos y PET para las botellas.

El Alcalde Francisco Juan ha destacado que “queremos implicar al máximo a la población porque tener un municipio más limpio es cosa de todos y con un simple gesto, como limpiar donde ha orinado o recoger los excrementos y depositarlos en el contenedor, ganamos todos”.

El concejal de Servicios y Medio Ambiente ha recordado que “los parques caninos de Alcalà y Alcossebre se limpian diariamente y se reponen las bolsas y también se realizan limpiezas en profundidad de forma periódica, así como de esquinas y calles con limpieza de agua a presión y desinfectante pero, además del esfuerzo del Ayuntamiento, es necesaria la implicación de todos para disminuir la presencia de restos”.

La ordenanza municipal de tenencia de animales ya contempla sanciones que van de los 30 a los 600 euros para los propietarios de animales que depositen los excrementos en la vía pública.