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El PP pide al tripartito "una política inclusiva que permita distribuir la riqueza de l'Alcora entre las empresas que operan en la localidad"

El PP pide al tripartito "una política inclusiva que permita distribuir la riqueza de l'Alcora entre las empresas que operan en la localidad"

    El grupo municipal del Partido Popular en l'Alcora ha solicitado al tripartito que gobierna en la localidad que distribuya de una forma “inclusiva” la riqueza de l'Alcora, de forma que no se produzcan “vetos” ni “exclusiones” entre los profesionales que operan en la localidad.

    Merche Mallol, concejala del Partido Popular en la localidad, ha animado a la coalición a distribuir los fondos del municipio “sin imponer cruces”. Lo ha hecho después de que comerciantes del municipio hayan trasladado a la formación política su malestar por la exclusión de la coalición en la prestación de servicios que históricamente se distribuían entre los negocios que operan en la localidad.

    “No es la primera vez que ocurre en la prestación de servicios o provisión de material”. Sin embargo, “creemos que es fácilmente evitable”. La edil ha hecho estas consideraciones después “del último capítulo” que llevó al tripartito a excluir de la contratación de los típicos rollos de Pascua a uno de los cuatro hornos de pan que operan en la localidad.

    En un gasto cercano a los 15.000 euros, ha explicado Mallol, “el tripartito decidió dejar fuera a una panadería por una diferencia de 0,3 céntimos en cada unidad”. “Por 165 euros, el alcalde de Compromís ha dejado fuera a un negocio que llevaba décadas trabajando para el pueblo, elaborando el único rollo que las características de su negocio le permitía elaborar”.

    En opinión de Mallol, “este es solo un ejemplo de la política de exclusión que practica el tripartito”. “Consideramos que los fondos que administra Compromís con el apoyo del PSPV y del Grupo de no Adscritos deben distribuirse de la forma más equitativa posible. Por ello, entenderíamos que se hubiera retirado el servicio a un negocio si este hubiera sido desproporcionado y gravoso para el municipio. Pero que por 165 euros se excluya a una panadería cuando el alcalde se gasta 1.488 euros en renovar los 6 sillones de su despacho de alcaldía, nos parece muy triste”.

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