El Ayuntamiento de l’Alcora evita el derribo del Ágora
La infraestructura fue construida sobre terrenos de la CHJ y de la Generalitat sin contar con las correspondientes autorizaciones
Tras presentar una serie de alegaciones, el equipo de gobierno en l’Alcora ha conseguido revocar la orden de derribo impuesta por la Confederación Hidrográfica del Júcar, sobre la infraestructura del Ágora, ubicada en los Jardines de la Vila.
Cabe recordar que el Ágora, una instalación pensada para albergar actuaciones al aire libre, fue construida de manera ilegal -durante la legislatura del gobierno socialista de Javier Peris-, sobre terrenos que son propiedad de la CHJ y la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente.
El equipo de gobierno popular que ya conocía acerca de la ausencia de permisos en lo referente a los terrenos propiedad de la Conselleria, recibió una notificación el pasado 6 de julio de 2011 por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar. El contenido de dicha carta informaba al consistorio que el Ágora invadía, además, terrenos que eran de su propiedad, sin contar con la correspondiente autorización administrativa. Como consecuencia el Ayuntamiento debía abonar 2.000 euros para hacer frente a la correspondiente sanción y además se le instaba a algo todavía más grave, debía derribar el Ágora.
Desde el primer momento, la alcaldesa de l’Alcora, Merche Mallol y su equipo de gobierno se pusieron a trabajar para tratar de solucionar este grave problema. Se presentaron todas las alegaciones necesarias con el objetivo de impedir el derribo, ya que no se debe olvidar que su construcción costó a los alcorinos 364.997 euros.
Las gestiones llevadas a cabo desde la actual concejalía de Urbanismo y Medio Ambiente, que dirige Vicente Mateo, han dado sus frutos y recientemente, el Ayuntamiento de l’Alcora ha recibido la correspondiente autorización que legaliza el Ágora.
Merche Mallol, alcaldesa de l’Alcora: “El Ágora ya no tendrá que ser derribada. Gracias al trabajo incansable por defender los intereses del pueblo hemos conseguido legalizar esta infraestructura. De esta manera hemos solucionando uno de los problemas heredados del gobierno socialista, porque tal y como ha quedado demostrado no hicieron las cosas bien”.
Y añade: “Desde el gobierno, nuestra responsabilidad era defender una infraestructura que ha costado muchísimo dinero a los alcorinos, pese a que el Partido Popular, siempre consideró que el momento en que se decidió construir el Ágora no era el más oportuno, ya que había otras prioridades”.
El equipo de gobierno de l’Alcora sigue trabajando para solucionar el problema, que todavía queda pendiente con la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente. Ya se ha solicitado una reunión con el secretario autonómico de Infraestructuras y Transporte para llegar a un acuerdo sobre el uso de los terrenos donde se ubica el Ágora.
