Un festival que no fue. El futuro del Marenostrum, en el aire

Una semana después del desagradable anuncio, esta es la imagen que presentaba este viernes el terreno que iba a albergar el macrofestival Marenostrum, el mismo terreno por el que no se pudo celebrar y se tuvo que cancelar a menos de 24 horas de que comenzara, con todas las entradas vendidas y los asistentes empezando a acudir al recinto.

El pequeño, y hasta hace unos días desconocido, término del Peixets se ha vuelto famoso y no precisamente por buenas noticias. Sin embargo, a pesar de la no celebración, la imagen que presenta ahora es bien distinta a la que se observaba hace unos meses con las montañas de basuras que inundaban la zona y el consiguiente olor que se desprendía, sobre todo en días calurosos.

Pero a pesar de la cancelación, el impacto mediático y las críticas recibidas, la empresa organizadora ha “cumplido su compromiso al 100%” por lo que respecta a la limpieza del entorno e incluso se ven palmeras y zonas verdes plantadas, según han asegurado fuentes del Ayuntamiento de Alboraya a elperiodic.com. Una acción que muestra la buena sintonía entre consistorio y organización y de hecho la relación continua siendo fluida ya que los miembros de la organización, según cuentan desde el Ayuntamiento, siguen acudiendo a la zona ya que quedan gestiones y asuntos por cerrar: “El trato con ellos es muy bueno”, concluyen estas mismas fuentes.

Y es que han sido unos días intensos para los organizadores, que han denunciado que reunían todos los requisitos legales para la celebración del festival el pasado fin de semana y que dejó sin conciertos a 17.500 personas. Desde la organización han culpado a la Consellería de impedir la celebración del mismo ya que los cuatro informes que recibieron del Ministerio de Medio Ambiente eran favorables. Pero fue el Ayuntamiento de Alboraya el que tuvo la última palabra y decidió cancelar la celebración, como ya anunciaron en su momento que harían si no contaban con todos los permisos necesarios.

Estas mismas fuentes del Ayuntamiento de Alboraya aseguran a elperiodic.com que están “tristes” por el desarrollo de los acontecimientos estos últimos días ya que los organizadores “eran gente joven, con mucha energía y sin ningún color ideológico pero que se han visto envueltos en esta guerra política”. Además, insisten en la idoneidad del municipio valenciano para albergar este festival: “Alboraya reunía todas las condiciones y nos situaba en el mapa”, lamentan.

Sobre las informaciones que se están difundiendo y que ponen de manifiesto que la organización estaría buscando otra ubicación para celebrar el festival este verano, desde el consistorio ven “inviable” esta posibilidad debido a la falta de recursos: “No hay dinero y tienen que pagar a muchos proveedores”.

Precisamente algunos de estos proveedores eran horchateros que no pudieron poner sus puestos y se echaron a perder muchos productos perecederos. Desde el Ayuntamiento de Alboraya denuncian que, durante la reunión que mantuvo la empresa organizadora con la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, los horchateros no fueron atendidos por la Consellería y no pudieron hacerles entrega de un escrito.

Y mientras se suceden las reacciones todavía una semana después, sigue en el aire qué pasará con el dinero de las entradas y si finalmente se reembolsará. De momento, la empresa organizadora del festival ha habilitado un enlace en su página web para reclamar el coste de la entrada, todo ello sin concretar fechas y sin asegurar que efectivamente vaya a hacerse dicha devolución.