Reparto de arroz amb fesols i naps en Alboraya

Durante las fiestas mayores de Alboraya no podía faltar el toque tradicional gastronómico. Después de la resaca de la Noche de Paellas, llegan las famosas calderas que han alimentado durante años a los vecinos de la localidad en estos días tan festivos.

Este sábado a lo largo de todo el recinto ferial han ido desfilando cerca de 2.400 personas. Todas ellas cargadas con ollas esperando impacientes su turno, para que los maestros caldereros las rellenen con arroz amb fesols i naps, uno de los platos más antiguos de la gastronomía valenciana.

Para la cocción de este consistente menú han sido necesarios más de 40 kilos de productos naturales de la huerta, que poco a poco han ido llenando cada una de las 13 calderas.

A las 8 de la mañana los maestros caldereros han empezado su dura jornada laboral, porque aunque parezca un plato difícil de elaborar según Vicente, uno de los expertos chefs “cocinar este plato no tiene ningún misterio, sólo hace falta paciencia, cariño y cuidar pequeños detalles como el fuego y remover bien los ingredientes”

Con todas esas indicaciones, tan sólo hacen falta cinco horas para que la carne, la verdura y el arroz queden en perfecta harmonía y estén listos para servir y degustar.