San Isidro congrega a centenares de animales en Alboraya
Al acto acudieron vecinos de Carpesa, Massanassa, Paterna, Meliana, Almácera, Bétera y Benifaraig
El Consell agrari de Alboraya, presidido por el alcalde de la localidad Miguel Chavarría, junto al párroco de la iglesia Asunción de nuestra señora José Vicente, celebró ayer en la calle de la Milagrosa de Alboraya como cada verano la ceremonia de la bendición y pasacalle de animales en el día de San Isidro Labrador.
El vicepresidente del Consell Agrari, Francisco López, señaló que este día, donde la labor de los animales de labranza esta muy presente, sirve para recordar los orígenes de un pueblo que ha vivido del trabajo en la huerta durante siglos y hasta no hace mucho.
En el acontecimiento de índole religiosa desfilaron en primer lugar los niños acompañados de todo tipo de mascotas como perros, gatos, hurones, peces, tortugas o pajaritos e incluso aves rapaces, entre otros animales. Los más pequeños fueron recompensados con una gran bolsa de caramelos y golosinas por su participación.
En la segunda parte, la más esperada por todos, la calle Milagrosa se llenó de carruajes tirados por caballos de labranza y jinetes a los lomos de ágiles y atléticos corceles. A modo de recompensa, todos los participantes recibieron un título conmemorativo de su paso por la fiesta.
Los premios de este año recayeron, entre otros, en cuatro vecinos de Alboraya: Juan Moreno obtuvó el trofeo de la Cooperativa Valenciana San Cristobal, Idaia Abietar consiguió el trofeo del Consell Agrari, Javier Aguilar logró el premio Caja Mar y Jose Vicente de la familia Roquet se alzó con el trofeo de la Horchatería Vida.
El resto de trofeos fueron para Rafael Pérez de Meliana que obtuvo el trofeo de la Horchatería Els Sariers, Javier también de Meliana alcanzó el galardón otrogado por la Horchatería Rin y Álvaro y su abuelo de Almácera fueron laureados con el trofeo de la Acequia de ‘Rascanya’.
La celebración de este año contó con la participación de vecinos del mismo pueblo y de Carpesa, Massanassa, Paterna, Meliana, Almácera, Bétera y Benifaraig, según el Consell Agrari.
El vicepresidente del Consell Agrari, asimismo, destacó que ahora es necesario rememorar el pasado histórico del pueblo más que nunca porque los labradores están pasando por una situación económica difícil al sentirse presionados por las grandes superficies que ajustan los precios a los intermediarios y ellos, a su vez, a los huertanos que cada vez tienen una menor ganancia.
