FALLAS

Adiós a unas fallas sin actos pero con más sentimiento que nunca

LAURA HERRERAS - 20/03/2021 | Fotógrafo: Héctor Calonge de Lucas

Inolvidable despedida la que dieron localidades como Burriana, donde se lanzaron castillos artificiales en el punto exacto en el que habría ardido una falla

Todos los años la frase se repite cada 20 de marzo: las fallas, como el Ave Fénix, resurgen de sus cenizas y empiezan a preparar la fiesta del año siguiente. Este 20 de marzo esta reflexión es más cierta que nunca ya que representa el sentir del mundo fallero y de la sociedad valenciana: tornarem.

Porque el 2021 nos ha vuelto a dejar sin fiesta pero no sin el sentimiento fallero. Hemos visto cientos de iniciativas de fallas, falleros, vecinos y asociaciones que han homenajeado a la fiesta de formas inimaginables: desde la mascletà con pelotas de baloncesto de unos alumnos de educación física, hasta las ofrendas a título personal para honrar a la patrona de los valencianos.

Este 19 de marzo el ambiente fallero inundó cada rincón de las ciudades a pesar de las lluvias. Pudimos ver ofrendas improvisadas, misas falleras, vecinos ataviados con los trajes falleros, mascletàs desde los balcones con sartener y cazos sustituyendo a la traca y, para culminar, uno de los actos más preciosos vividos estas fallas.

En Burriana hasta 19 castillos iluminaron la medianoche desde cada uno de los 19 puntos en los que se debería haber plantado una falla. Una preciosa iniciativa que emocionó al mundo fallero y a todos los vecinos y que también se repitió en Sagunto. Desde el sector pirotécnico hay querido agradecer el compromiso de Burriana con el mundo fallero y el comportamiento ejemplar de los vecinos en una jornada que quedará en el recuerdo de todos los burrianenses.

Las imágenes que grabaron algunos aficionados y también desde la Pirotecnia Martí, que suministró la pólvora para esta iniciativa organizada por el Ayuntamiento, muestran cómo los vecinos salieron al balcón a disfrutar del momento único y como, al finalizar la traca, el silencio es roto por los miles de aplausos de una Burriana emocionada.

Volviendo a Valencia, donde se decidió no lanzar pirotecnia tras las recomendaciones de la conselleria de Sanidad, el centro de la ciudad se llenó de ambiente aprovechando el día festivo y, a pesar de que la lluvia obligó a sacar los paraguas en algún momento y al final del día, la jornada transcurrió con normalidad, con familias paseando y muchos fieles yendo a saludar a la Virgen de los Desamparados.

El mundo fallero se despide así de una semana con sentimiento agridulce y con la esperanza de celebrar la fiesta más pronto que tarde, si la pandemia lo permite. Recogemos la bonita reflexión que nos dejó la Fallera Mayor de Valencia, Consuelo Llobell, hace unos días en una entrevista con elperiodic.com:

“Es la hora de demostrar que verdaderamente las fallas no son cinco días, que siguen vivas y que cuando nos referimos a ‘volveremos’ queremos decir que volverán esos cinco días, esas mascletàs, esas celebraciones… porque las fallas son una forma de vida y no se han ido, siguen estando en nuestra forma de actuar y nuestro pensamiento”.