El presidente de la Audiencia Provincial desvela en Xàbia cómo es la respuesta judicial ante la violencia de género
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11/03/2011
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El presidente de la Audiencia Provincial de Alicante, Vicente Magro, ofreció el pasado martes una magnífica ponencia en Xàbia, en el marco de los actos organizados por la concejalía de la Igualdad en conmemoración del Día de la Mujer. La conferencia, titulada como “La respuesta judicial ante la violencia de género”, dio respuesta a dos preguntas claves: ¿Qué está pasando con la violencia de género?¿Lo estamos haciendo bien?.
En lo que llevamos de año, son 14 las mujeres muertas a manos de sus parejas, solamente tres de ellas habían denunciado. Una cifra escalofriante que hace incidir en la importancia de denunciar, según apuntó este excelente profesional impulsor de grandes avances contra esta lacra social.
Magro explicó que la violencia es ejercida esencialmente por varones y que supone un atentado contra los derechos humanos de la víctima. La violencia de género es “socialmente indeseable y debe ser perseguida y condenada”, destacó el presidente de la Audiencia, que continuó asegurando que “la privación de libertad no es la única ni la mejor de las medidas a adoptar para que el derecho penal pueda dar una respuesta a los hechos delictivos cometidos por una persona”.
Además, consideró que debe de ampliarse a la violencia de género la medida de libertad vigilada post cumplimiento de sentencia, recogida en la última reforma del código penal para los delitos de terrorismo y agresiones sexuales, para así dar una mayor protección a las víctimas y evitar las de un futuro. El especialista señaló que “el maltratador no tiene una afectación mental, agrede sabiendo lo que hace” y resaltó “el peligro que conlleva para las mujeres convivir con su agresor”.
Desde el 2004 la Audiencia Provincial de Alicante es pionera en los programas de reeducación. A estos programas asisten maltratadores primarios, que han sido condenados a penas inferiores a dos años en ausencia de reincidencia, es decir, han de ser primeras condenas. En este sentido, “constituyen un paliativo para que en estos casos, en los que no han de ingresar en prisión, las agresiones no queden impunes”, apostilló Vicente Magro.
En lo que llevamos de año, son 14 las mujeres muertas a manos de sus parejas, solamente tres de ellas habían denunciado. Una cifra escalofriante que hace incidir en la importancia de denunciar, según apuntó este excelente profesional impulsor de grandes avances contra esta lacra social.
Magro explicó que la violencia es ejercida esencialmente por varones y que supone un atentado contra los derechos humanos de la víctima. La violencia de género es “socialmente indeseable y debe ser perseguida y condenada”, destacó el presidente de la Audiencia, que continuó asegurando que “la privación de libertad no es la única ni la mejor de las medidas a adoptar para que el derecho penal pueda dar una respuesta a los hechos delictivos cometidos por una persona”.
Además, consideró que debe de ampliarse a la violencia de género la medida de libertad vigilada post cumplimiento de sentencia, recogida en la última reforma del código penal para los delitos de terrorismo y agresiones sexuales, para así dar una mayor protección a las víctimas y evitar las de un futuro. El especialista señaló que “el maltratador no tiene una afectación mental, agrede sabiendo lo que hace” y resaltó “el peligro que conlleva para las mujeres convivir con su agresor”.
Desde el 2004 la Audiencia Provincial de Alicante es pionera en los programas de reeducación. A estos programas asisten maltratadores primarios, que han sido condenados a penas inferiores a dos años en ausencia de reincidencia, es decir, han de ser primeras condenas. En este sentido, “constituyen un paliativo para que en estos casos, en los que no han de ingresar en prisión, las agresiones no queden impunes”, apostilló Vicente Magro.
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