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El acusado de matar a su compañero de casa niega que se peleara con él ese día

    El hombre de nacionalidad ucraniana acusado de matar a un compatriota con el que vivía en una vivienda adosada de Vinaròs propinándole puñetazos y patadas y agrediéndole con diversos objetos el 20 de mayo de 2006 ha negado hoy que se peleara con él ese día y ha dicho que lo vio por última vez el día anterior.

    El acusado, S.C, quien se encuentra en prisión provisional desde el 25 de mayo de 2006, ha contestado a las preguntas de la Fiscalía y de la Defensa en la primera sesión del juicio con jurado popular que se celebra en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Castellón y ha negado cualquier relación con la muerte de O.G.

    El acusado, para quien el Fiscal pide una pena de 20 años de prisión por asesinato, ha asegurado que compartía domicilio con el fallecido y con otras dos personas y que el sábado 20 de mayo se fue a por leña y cuando volvió a la casa la víctima no se encontraba en ella.

    Además, ha explicado que su relación con el fallecido "en principio era buena", aunque ha reconocido que el día anterior discutió con él y le empujó.

    Dos de los testigos que han declarado hoy en el juicio, ciudadanos rumanos que visitaban asiduamente la casa y que estuvieron jugando a cartas el día de autos, han asegurado que el acusado golpeó al fallecido, pero "sin mucha fuerza", porque ambos estaban "borrachísimos".

    Según el relato de estos testigos, el acusado estaba jugando con ellos a cartas en el exterior de la vivienda cuando la víctima comenzó a "molestar a la gente y a hablar mal", momento en el que el acusado "se levantó para tranquilizarlo" porque era la persona más respetada de la casa.

    Según han dicho los testigos, el acusado comenzó a golpearlo con los puños, cogió una botella vacía de cerveza y la estampó sobre la víctima, aunque según dicen no lo hizo con mucha fuerza porque estaba muy borracho y se tambaleaba.

    Después, ambos han dicho que el fallecido se introdujo en el interior de la vivienda y el acusado lo siguió, y que ellos permanecieron en el exterior, desde donde escucharon unos golpes.

    Según el fiscal, los ruidos que escucharon se corresponden con tres golpes que S.C propinó a su víctima con un tablero de madera, aunque los testigos han dicho que desconocen si esto fue así.

    Uno de los testigos ha confirmado que, cuando salieron de la vivienda, el fallecido se lavó la cara porque la tenía llena de sangre, y ha confirmado que el acusado cogió entonces un cubo metálico, con el que hirió a la víctima.

    Según han declarado, las peleas entre el fallecido y sus compañeros de vivienda eran muy habituales, aunque han asegurado que el sábado 20 de mayo fue la única vez que vieron a S.C golpear al O.G con objetos contundentes.

    En el juicio de hoy ha declarado otro testigo que estuvo con la víctima el día anterior. Según ha dicho, en ese momento el fallecido ya presentaba numerosas heridas en la cara y tenía la nariz escayolada.

    En la sesión de hoy ha declarado por último el hombre que descubrió el cadáver cuando iba a regar sus campos en la partida Punt Roca de Vinaròs en la mañana del lunes 22 de mayo, quien ha manifestado que no vio si presentaba golpes porque al intuir que estaba muerto, se fue del lugar para avisar a la Policía.

    La Fiscalía solicita una pena de 20 años para el acusado, mientras que la Defensa pide la libre absolución de S.C, porque considera que la víctima falleció por muerte natural y no por una de las "discusiones habituales" que mantenían "un grupo de vagabundos que convivían juntos y compartían habitación, comida y ropa".

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