Compromís solicita al Gobierno central la aplicación del impuesto Tobin sobre transacciones del sector bancario
El grupo municipal de Compromís per Vila-real ha presentado una moción al pleno para mostrar su posicionamiento a favor de la tasa Tobin. La concejala de Economía en el Ayuntamiento, María Dolores Parra, ha explicado que "a principios de este mes de diciembre, una decena de países de la Unión Europea, incluido el nuestro, han acordado las líneas generales de un futuro acuerdo para establecer un impuesto sobre las transacciones financieras, conocido como tasa Tobin".
"Esta tasa, lo que hace es valorar las transacciones financieras a corto plazo, con el objetivo de medir la especulación", indica Parra. "La idea es cobrar un pequeño impuesto sobre las transacciones, en general, menos del 1% del valor de transacción, desincentivando los grandes volúmenes de compra a corto plazo".
"Ha quedado demostrado que la especulación en el sector bancario y financiero ha sido el principal responsable de la actual crisis económica mundial", señala la edila, "las actividades de las entidades bancarias, de los gestores del fondo de alto riesgo y otras instituciones financieras se desarrollan sin gran supervisión ni suficiente regulación y son, como ha demostrado la crisis actual, sumamente nocivas para la justicia social", apunta.
En este sentido, Parra afirma que "el sector financiero, que es hasta 26 veces más rentable que todos los demás, es el que menos impuestos paga". "Dadas todas estas circunstancias, más los millonarios rescates a los bancos pagados con dinero público, las deudas a las que estamos sometidos muchos países y las iniquidades sociales que este sistema provoca, lo más lógico sería que estos gobiernos establecieran finalmente esta tasa en 2016, tal y como han comunicado a los medios este mes de diciembre y por fin ganemos en más democracia", destaca la responsable de Economía.
Por ello, desde Compromís per Vila-real se insta al Gobierno central a que la recaudación proveniente de la aplicación de esta tasa quede garantizada para destinar acciones dirigidas a paliar los efectos de la crisis, luchar contra la pobreza y a combatir los efectos del cambio climático. Además, se solicita a la UE a que todos los países apliquen este impuesto para garantizar el buen funcionamiento.