Almassora y Vila-real reclamarán de la mano a la EPSAR que ejecute el proyecto de supresión de la depuradora de Vora Riu
Almassora y Vila-real irán de la mano para reclamar a la Generalitat Valenciana que elabore y ejecute cuanto antes el proyecto de supresión de la depuradora de Vora Riu y la derivación de las aguas que se tratan en esta estación hacia la EDAR de Almassora y la mancomunada. La eliminación de la depuradora, que en los últimos años se había convertido en un foco de malos olores y molestias para Almassora, ha sido uno de los principales asuntos que la alcaldesa, Susanna Nicolau ha tratado con su homólogo, el alcalde de Vila-real, José Benlloch, en una reunión mantenida recientemente.
“La situación de la depuradora de Vora Riu es un problema histórico que nos afecta a los dos municipios y, por tanto, debemos también sumar esfuerzos para lograr que la solución acordada llegue lo más pronto posible”, señala Benlloch, quien recuerda el acuerdo alcanzado con la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales a principios de año para suprimir la vieja estación. Para ello, sin embargo, los responsables municipales deberán esperar al nombramiento oficial del nuevo responsable de la EPSAR, todavía por formalizar. “Una vez esté el interlocutor claro, la alcaldesa de Almassora y yo mismo acudiremos juntos para demandar que una obra de esta envergadura, tanto en el aspecto ambiental como en la mejora de la calidad de vida de nuestros vecinos, no se demore más”, agrega Benlloch.
Por su parte, la alcaldesa de Almassora, Susanna Nicolau, ha remarcado su intención de colaborar con Vila-real y ha recordado que “es necesario que se amplíe nuestra depuradora para poder dar un servicio con garantías medioambientales que no afecten al entorno”. Nicolau ha añadido que “otro aspecto importante para nosotros es revisar con el Consell el convenio firmado años atrás, puesto que su cumplimiento por parte del anterior equipo ejecutivo ha dejado mucho que desear y nos ha ocasionado numerosos problemas”.
El proyecto, valorado en 2,7 millones de euros a cargo íntegramente de la Generalitat, supondrá la construcción de dos nuevas estaciones de bombeo y las conducciones necesarias para derivar las aguas hacia las depuradoras de Almassora y la mancomunada de Vila-real, Onda, Betxí y les Alqueries. El Ayuntamiento y la EPSAR, de acuerdo con el consistorio de Almassora, acordaron esta solución a principios de 2015 después de años de polémicas, “sin que el Partido Popular hubiera sido capaz de encontrar una solución, más allá de presentar a bombo y platillo un proyecto de 12 millones de euros que después tuvieron que modificar y que nunca ejecutaron”, indica Benlloch.
Además de la supresión de la depuradora de Vora Riu, Benlloch y Nicolau han tratado otros asuntos de interés para ambos municipios, como el traspaso de poderes en la presidencia del Consorcio del Millars, ostentada hasta ahora por Almassora y que asume para los próximos dos años Vila-real. Precisamente el Millars es el eje de uno de los proyectos de mayor envergadura que ambos municipios pueden compartir en los próximos años. “El entorno de nuestro río es un paraje de enorme valor paisajístico y ambiental que nos une más allá de las fronteras locales y por el que debemos trabajar juntos”, señala Benlloch. Con este objetivo, el alcalde plantea la posibilidad de abordar la concurrencia de ambos municipios a la convocatoria de ayudas europeas para la rehabilitación del paraje natural, incluyendo una ambiciosa actuación sobre el puente de la ermita que conecta ambos municipios.
