Protección Civil forma a casi 6.000 alumnos para hacer frente a situaciones de emergencia en 15 centros educativos de Vila-real

Un total de 5.920 alumnos de 15 centros educativos de Vila-real han participado en los cursos formativos de autoprotección y simulacros de emergencia organizados por el cuerpo de Protección Civil en 2013. Una colaboración con los centros que tiene como objetivo formar a la comunidad educativa en los protocolos de emergencia que hay que aplicar en caso de incendio u otras emergencias y minimizar las situaciones de riesgo. Así lo ha explicado el concejal de Seguridad Ciudadana, Javier Serralvo, quien ha destacado la importancia que tiene este programa destinado a profesores y alumnos “ya que, ante una emergencia, ellos son los primeros que han de saber reaccionar”.

Las actividades de prevención que lleva a cabo Protección Civil se empiezan a programar en el inicio del curso escolar. En concreto se planifican charlas informativas con los directores de aquellos centros que han decidido recibir formación de este plan de autoprotección para que, tanto alumnos como profesores, conozcan los protocolos de actuación en el caso de emergencias o eventuales evacuaciones de colegios o institutos. Protección Civil se encarga de concertar con cada centro las fechas para impartir estas sesiones que irán seguidas por la realización de simulacros de emergencias. De este modo se establece un calendario de trabajo con una serie de clases que están enfocadas a la organización de los maestros y profesores en situaciones de riesgo y a enseñar a los alumnos qué deben hacer en estos casos y cuál es la ruta asignada hasta el punto de evacuación del centro.

“Son unas clases que impartimos en cada aula adaptándonos a las edades que tienen los alumnos”, indica el técnico del Servicio Municipal de Protección Civil, Ismael Solsona, quien remarca la importancia que el personal del centro tenga unos conocimientos básicos “para poder actuar de una manera organizada y ordenada ante una emergencia”. Posteriormente, se establece el día en que se llevará a cabo el simulacro “creando una hipotética situación”, detalla.

Finalizada esta actividad, se reúnen con la dirección del centro así como con el resto de personal colaborador para evaluar el transcurso de la situación creada y dar solución a los problemas de organización o dificultades que hayan podido surgir para que, en caso necesario, se modifique algún aspecto del plan. “Los simulacros permiten comprobar que profesores y estudiantes han aprendido estas directrices pero también permiten poner a prueba los servicios de emergencia y los tiempos de respuesta ante estas eventualidades” indica Solsona.

“Dependiendo del resultado, se programan ejercicios de prevención para profundizar en aquello que ha fallado”, matiza Solsona quien avanza que, precisamente, esta semana, se iniciarán cursos de primeros auxilios y extinción de incendios para maestros y profesores para que, “ellos mismos puedan componer sus equipos de primera intervención” concluye el técnico de Protección Civil.