El proyecto piloto Camins Escolars avanza en la definición de rutas seguras al colegio con la participación de más de 110 alumnos

El proyecto Camins Escolars, impulsado por la concejalía de Sostenibilidad para el fomento de la movilidad infantil, sigue avanzado con nuevas actividades que implican a más de 110 alumnos de los colegios públicos Pasqual Nàcher, Botànic Calduch y La Panderola. Esta misma semana, los escolares de cuarto de Primaria de Pasqual Nàcher han podido participar en una nueva sesión de conocimiento y reconocimiento de su barrio, con el objetivo de que los propios niños y niñas detecten cuáles son las necesidades y mejoras para poder hacer el trayecto a la escuela de una manera segura y sin utilizar el coche.

“El proyecto de Camins Escolars se plantea como principal objetivo trabajar la autonomía personal de los niños y niñas de Vila-real y el fomento de la movilidad sostenible desde edades bien tempranas para hacer de Vila-real una ciudad más segura y habitable”, valora el concejal de Sostenibilidad, Xus Sempere. “Por eso una de las características más interesantes de este proyecto piloto es que implica a los propios escolares en el diseño de las rutas seguras por ir cada día al colegio, con actividades que permiten a los alumnos conocer mejor su entorno y sensibilizarlos sobre cuestiones que afectan la movilidad urbana”, detalla el edil.

Con esta filosofía, una de las actividades que están trabajando los alumnos es la descripción de los elementos que conforman el paisaje urbano y sus características. Esta actividad de conocimiento del entorno, realizada por los alumnos de cuarto de Primaria del colegio Pasqual Nàcher esta semana, parte de la discusión en grupos de escolares a quienes se les ha entregado un plano para situarse en él y se les ha animado a identificar en él varios elementos singulares de su barrio como parques, centro de salud, colegios o las casas de cada uno de ellos, entre otros. Los alumnos también han plasmado en un gran mural los elementos que se encuentran por la calle, según si les parecen positivos, negativos o neutros para su seguridad, utilidad y funcionalidad. Finalmente, la actividad ha continuado en la calle, donde los alumnos han podido trasladar los conocimientos aprendidos en el aula, todo con el objetivo de poder mejorar su autonomía y movilidad por las calles de su barrio.

Además de esta sesión, el proyecto Camins Escolars trabaja en cada uno de los centros que participan una media de siete actividades, tanto dentro como fuera del aula, distribuidas a lo largo del curso y que han sido previamente acordadas con los responsables de cada colegio. A lo largo de las siete actividades los propios niños irán detectando las necesidades y mejoras para realizar el trayecto de casa a la escuela de una manera segura.

El proyecto piloto Camins Escolars pretende, entre otros, concienciar y educar en la importancia de la movilidad infantil para el desarrollo de los niños, además de incidir en la sensibilización ambiental y hábitos saludables de los alumnos. Además de la concejalía de Sostenibilidad, en la iniciativa también participan los departamentos municipales de Urbanismo, Policía Local y Protección Civil, los centros escolares, profesorado, asociaciones tanto de vecinos como otros colectivos, comercios, padres y madres.

La actividad de conocimiento del barrio continúa la semana que viene en los colegios Pasqual Nàcher y Botànic Calduch y, para enero, Camins Escolars contará con la colaboración de Acudim para poner de relieve a los alumnos las dificultades que tienen las personas con movilidad reducida cuando se desplazan por las calles de su barrio.