Serralvo considera que la situación de la hacienda municipal ha mejorado de forma sustancial

El concejal de Hacienda, Javier Serralvo, ha señalado este viernes que la situación de la hacienda municipal ha mejorado “de manera sustancial, sobre todo porque ahora las empresas saben que el Ayuntamiento paga por los servicios que pide y porque ahora es un ayuntamiento austero, que no gasta más de lo que necesita” y ha añadido que “el Ayuntamiento era hace un año un pozo sin fondo y ahora las empresas y los ciudadanos pueden volver a confiar en el consistorio”.

Serralvo, que ha hecho balance tras un año al frente del departamento de Hacienda, ha enumerado acciones como el pago a proveedores, el saneamiento de las cuentas públicas y el control del gasto, así como medidas como la supresión del ICIO, la rebaja de sueldos y asesores, la congelación de la contribución o la puesta en marcha de un plan de digitalización del registro de facturas, que permitirá a partir de la semana próxima incrementar el control y ajustar a dos meses el plazo de pago son algunas de las medidas adoptadas en este año desde el departamento municipal de Hacienda.

Ahora el objetivo es trabajar para reducir hasta el 50% el endeudamiento de la ciudad. En este sentido, el concejal recuerda que el PP pasó en dos años del 7% al 65% de endeudamiento. En esta línea, Serralvo ha señalado que la anulación de 600.000 euros en facturas dudosas y la investigación exhaustiva de cualquier factura a que plantee dudas, así como el encargo de una auditoría externa  permitirá conocer el “endeudamiento real del consistorio, teniendo en cuenta los numerosos convenios firmados por el anterior equipo de gobierno en aquello que llamó el urbanismo a coste cero, que todos sabemos que no existe”, son otras de las decisiones adoptadas durante este primer año de mandato, del que Serralvo destaca particularmente el saneamiento de las cuentas, que va a permitir a partir de ahora, “trabajar para reducir el endeudamiento de la ciudad”.

Pago a proveedores
“En menos de medio año pagamos más de 4,5 millones de euros de facturas que el anterior equipo de gobierno había dejado pendientes, algunas con más de dos y tres años de retraso. Después llegó el plan de pago de proveedores de Rajoy, cuando el Ayuntamiento de Vila-real ya teníamos los deberes hechos, para hacer frente a otros 2,2 millones de euros más atrasados que se convertirán en tres millones por los intereses del crédito que tendrá qua asumir también el consistorio”, recuerda Serralvo, quien apunta que ha sido precisamente gracias a estos “deberes hechos” por lo que el plan de ajuste de Vila-real no se ha disparado a cifras mayores.

Revisión de tasas y precios públicos
“Este plan de ajuste a que nos obliga el Gobierno central nos ha forzado a revisar algunas tasas y precios públicos. Teníamos dos posibilidades para hacer frente a la situación que dejó el Partido Popular en Vila-real: seguir subiendo la contribución como hacía cada año el PP y que fuesen todos los ciudadanos los que pagasen por esta herencia o actualizar algunas tasas para que los vecinos que utilizan determinados servicios paguen un poco más por ellos”, añade.

“Dijimos que no subiríamos la contribución y lo hemos cumplido, congelando por primera vez en más de una década los recibos del IBI. Pero además hemos adoptado una medida pionera para favorecer que las empresas se instalen en Vila-real o mejoren sus instalaciones para ser más competitivas y generar empleo y economía, mediante la eliminación del ICIO”, detalla el responsable de Hacienda.

Presupuestos austeros
En esta línea, el edil apunta que, pese a la disminución de ingresos que suponen estas iniciativas y “el lastre del crédito de 20 millones suscrito por el anterior equipo de gobierno”, el ejecutivo local aprobó “unos presupuestos austeros, racionales y ajustados a las necesidades de los vila-realenses, que en breve se complementarán con la aplicación de los remanentes de 2011, logrados gracias a la política de austeridad del actual equipo de gobierno, a no pagar por trabajos que no se han hecho, reducir alquileres externos y otros medidas significativas como las gestiones de la antigua Azuvi, por las que el Ayuntamiento de Vila-real ha conseguido ingresar lo que esta empresa adeudaba al consistorio”.