El equipo de gobierno cierra su primer año con un 80% de los compromisos con los vecinos cumplidos

El alcalde de Vila-real, José Benlloch, acompañado de los portavoces de los cuatro grupos que conforman el equipo de gobierno, ha hecho esta mañana balance del primer año al frente del Ayuntamiento de la ciudad. La congelación del Impuesto de Bienes Inmuebles, la eliminación del ICIO, las gestiones para que los trabajadores de Azuvi pudieran cobrar lo que les adeudaba la empresa o la reincorporación de los siete trabajadores municipales despedidos por el Partido Popular en la anterior legislatura, así como “pagar lo que se debía y sanear las cuentas municipales”, son las decisiones que el alcalde ha destacado de este primer año de gobierno en el que el ejecutivo local ha cumplido ya más del 80% de los compromisos adquiridos con la ciudadanía a través de los 21 puntos del pacto de gobernabilidad firmado por PSPV-PSOE, Bloc, Iniciativa y Esquerra Unida hace ahora un año. “En mayo de 2011 Vila-real votó por el cambio y hoy podemos decir que Vila-real ha cambiado”, señala el primer edil.

“Vila-real era un Ayuntamiento cerrado y lo hemos abierto, lo hemos hecho próximo, con iniciativas como los presupuestos participativos o el pleno participativo celebrado ayer mismo. Vila-real era un pozo sin fondo, con gastos irregulares que hemos impedido que salgan de las arcas municipales; un pozo sin fondo en deuda y morosidad, y en un año lo hemos saneado pagando más de 6,5 millones de euros de deuda con proveedores y controlando el gasto”, ha destacado el alcalde. “Hay tres cosas de las que me siento particularmente orgulloso de este año de mandato municipal: de abrir el Ayuntamiento a los ciudadanos, de pagar lo se que debe, sanear y hacer transparente la gestión local; y de los compromisos cumplidos, con más del 80% de los puntos del pacto de gobierno cumplidos”, añade. En esta línea, el alcalde se ha referido particularmente a la congelación del IBI, la supresión del ICIO, la bajada de los sueldos a los cargos y órganos de gobierno y la reducción de asesores con respecto a la anterior legislatura, además de la reincorporación de trabajadores despedidos por el PP y las gestiones para desbloquear los pagos de Azuvi. La recuperación del mercado en el centro, el encargo de una auditoría externa, el freno al gasto superfluo o el ahorro en alquileres municipales son otros de los compromisos cumplidos.

Los portavoces de Esquerra Unida, Alejandro Moreno, Iniciativa, Alberto Ibáñez, Bloc, Pasqual Batalla, y PSPV, Javier Serralvo, han coincidido también en una valoración positiva del primer año de legislatura, en el que “el equipo de gobierno se ha hecho cada vez más fuerte”, señala el socialista. “Había mucha gente que no daba un duro por el pacto de gobierno y hoy ese pacto continúa con más firmeza, decisión y esperanza en el futuro de Vila-real”, señala Batalla. “Nuestro primer objetivo hace un año era poner freno a la derecha y transformar Vila-real y lo hemos conseguido”, valora Ibáñez. En esta línea, Moreno concluye: “Hemos cerrado un ciclo y abrimos ahora un nuevo año con más fuerza para seguir dando buenos frutos para Vila-real”.