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Serralvo: “La herencia del PP, la deuda del Consell y el abandono de Diputación hacen necesario el plan de ajuste en Vila-real”

  • El portavoz del equipo de gobierno señala que “el Partido Popular es el menos indicado para hablar de buena gestión” y apunta que la previsión de remanentes de 2011 es el reflejo del trabajo “responsable” del actual ejecutivo municipal

El portavoz del equipo de gobierno de Vila-real, Javier Serralvo, ha lamentado hoy que “la herencia” del Partido Popular en la ciudad, la deuda que la Generalitat tiene contraída con el municipio y la decisión de la Diputación de eliminar a la ciudad de los Planes Provinciales de Obras y Servicios (PPOYS), que suponían una inversión anual de cerca de 300.000 euros, han colocado a Vila-real en la necesidad de elaborar el plan de ajuste exigido por el Gobierno central para poder pagar la deuda con proveedores acumulada por el anterior equipo de gobierno. “El plan de ajuste que hemos aprobado supone una previsión de ingresos de 280.000 euros al año en 10 años para poder hacer frente al crédito para pagar a proveedores, que no sabemos a cuánto habría ascendido si el PP hubiera seguido en el gobierno municipal”, señala Serralvo, en alusión a la deuda acumulada por ayuntamientos vecinos como Castellón o la Vall d’Uixó, mucho más elevada. “Aquí la deuda con proveedores que dejó el PP era de 6,5 millones de euros, pero el equipo de gobierno actual decidió poner solución a esta situación desde el primer día y llegamos al plan de pagos del Gobierno con 2,2 millones de euros de deuda gracias a la buena gestión realizada hasta ahora”, añade.

Serralvo también se ha referido a las últimas declaraciones del Partido Popular local sobre la previsión de remanentes de 2011 para señalar que “el PP es el menos indicado para hablar de buena gestión a Vila-real” y que “si existe esta previsión de remanentes es porque en la segunda mitad del año los vila-realenses han contado con un equipo de gobierno responsable y eficiente que ha tenido que hacer frente a la situación que el Partido Popular nos había dejado en herencia”. Esta “herencia”, añade, “no es un superávit de ocho millones de euros sino una deuda con proveedores de 6,5 millones de euros; un crédito de 20 millones de euros que hemos tenido que empezar a pagar este año para hacer grandes obras que no se pueden poner en marcha porque no pensaron en cómo hacerlo; edificios millonarios cerrados, como el CTE; una deuda arrastrada por la Generalitat con el Ayuntamiento y haber dejado a Vila-real fuera de los planes provinciales de la Diputación”. “Esta es la herencia del Partido Popular a Vila-real y, ya que no son capaces de asumir sus responsabilidades en la situación actual, harían bien al menos en no tergiversar y confundir a los ciudadanos”, afirma.

Frente a esta situación, puntualiza el portavoz, el equipo de gobierno “ha tomado en los últimos meses decisiones valientes y decididas, como sanear las cuentas municipales, controlar estrictamente el gasto o resolver el conflicto de Azuvi, que ha permitido que 210 trabajadores cobren sus indemnizaciones, así como los proveedores de la empresa y el propio Ayuntamiento, con más de un millón de euros que contribuyen a ese superávit”. La reincorporación de empleados despedidos por el PP para “dignificar los servicios públicos”, la rebaja del gravamen del IBI para congelar la contribución y la reciente decisión de eliminar el impuesto de construcciones “para hacer atractiva la ciudad para la instalación de nuevos proyectos, generar economía y crear puestos de trabajo” son otras de las actuaciones destacadas por Serralvo.

El portavoz del equipo de gobierno ha lamentado también las declaraciones del portavoz de la oposición en relación a la huelga general que, señala, “han pretendido dar la imagen de que en Vila-real se ha vivido una huelga salvaje, cuando lo realidad es que se vivió un jornada de normalidad y en los únicos casos en que se produjeron situaciones que condenamos absolutamente la policía actuó de inmediato”.

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