El Ayuntamiento reducirá el consumo y la factura energética con un plan especial de ahorro en instalaciones municipales
El concejal Xus Sempere presenta el proyecto, que constará de dos fases: una primera para identificar los edificios y sus consumos y una segunda en la que se elaborará una auditoría energética para determinar las acciones a realizar
El Ayuntamiento de Vila-real reducirá la factura energética de los edificios de titularidad municipal con el objetivo de lograr unas dependencias más sostenibles con el medio ambiente, al tiempo que se ahorra en el gasto. El concejal de Medio Ambiente, Xus Sempere, ha presentado hoy el plan de ahorro energético para instalaciones municipales, que ha echado ya a andar con una primera fase destinada a identificar todos los edificios sobre los que es posible actuar y sus características, así como la potencia instalada y el consumo real. Tras esta primera fase, se encargará la auditoría energética externa que permitirá definir las posibilidades de reducción del consumo y las acciones a adoptar para lograrlo.
“Dentro de la estrategia global de austeridad del equipo de gobierno, desde el departamento de Medio Ambiente hemos empezado a trabajar en un nuevo plan de ahorro energético que nos permitirá conocer exactamente cuál es la factura energética de los edificios municipales y aplicar medidas de ahorro allá donde sea posible”, explica Sempere. “Con este plan”, añade, “conseguiremos un doble objetivo: por una parte, reducir el consumo de energía en las dependencias municipales y lograr unas instalaciones más sostenibles con el medio ambiente y, por otro local, un importante ahorro económico”.
El plan de ahorro energético de las instalaciones municipales se desarrollará en dos fases. La primera, de la que se ocupan ya los servicios técnicos municipales, se ejecutará en un plazo aproximado de 35 días y permitirá disponer de una relación actualizada de todos los edificios de titularidad municipal, sobre los que el Ayuntamiento tiene potestad de actuación, así como de sus principales características, como superficie construida y habitable, año de construcción, potencia térmica y eléctrica instaladas y consumo real tanto térmico como eléctrico de los últimos dos años. “Estos datos nos darán una primera idea de cuál es el consumo energético real, dónde se está gastando más y, por lo tanto, por donde podemos empezar a recortar”, apunta el concejal de Medio Ambiente.
Con esta información actualizada, el Ayuntamiento podrá iniciar la segunda fase del plan de ahorro energético, consistente en la elaboración de una auditoría energética externa, para cuya contratación se analizarán las posibilidades de acogerse a convocatorias de subvenciones para este tipo de estudios energéticos. El informe, explica Sempere, aportará información sobre “las posibles acciones a realizar y las inversiones que serán necesarias para reducir la factura energética, siempre teniendo en cuenta que la relación entre el coste que supondrá implementar estas medidas y el ahorro que esperamos lograr con ellas sea positivo para el Ayuntamiento”.
“La austeridad y el consumo racional y sostenible de los recursos serán la base del departamento de Medio Ambiente que encabezo durante estos cuatro años. Con el inicio de este plan de ahorro energético en las instalaciones municipales comenzamos ya a trabajar en esta línea”, concluye el edil Xus Sempere.
