Benlloch y Batalla plantean reducir la distancia entre zonas para buscar el consenso en el traslado del mercado al centro

El alcalde de Vila-real, José Benlloch, y el concejal de Fomento Económico, Pasqual Batalla, se han reunido esta tarde con representantes de la Asociación de Vendedores Ambulantes de Vila-real para abordar el traslado del mercado al centro. En la segunda reunión de los dirigentes municipales con los vendedores desde su constitución formal en asociación hace tan sólo tres semanas, el alcalde y el concejal han trasladado a los vendedores una alternativa a las ubicaciones de las paradas planteadas hasta la fecha al objeto de poder llevar a cabo el traslado “de la forma más consensuada posible”. En esta línea, la propuesta del equipo de gobierno, que los vendedores han acogido favorablemente y que ahora deberán trasladar a su asamblea, pasa por reubicar algunos de los puestos de venta en el arrabal del Carmen, de tal manera que se dará una mayor solución de continuidad a las diferentes zonificaciones del mercado reduciendo la distancia entre la zona de fruta y verdura, en la avenida Cardenal Tarancón, y el área de ropa y otros productos.

“La recuperación del mercado en el centro es fundamental para la dinamización económica de Vila-real y de sus comercios”, recuerda el alcalde, José Benlloch, quien se muestra satisfecho de cómo se ha desarrollado la reunión y en cualquier caso puntualiza que “no se producirá ningún retraso en los plazos previstos para el traslado”. En la misma línea, Batalla recuerda que se ha dialogado con todos los sectores implicados para buscar el acuerdo con cada uno de ellos, “a diferencia de lo ocurrido en anteriores legislaturas, cuando el Partido Popular se llevó el mercado ambulante a las afueras sin hablar con nadie y con la oposición de vecinos y vendedores”.

En esta línea de buscar un traslado dialogado y beneficioso para toda la ciudadanía, Batalla y Benlloch han planteado esta tarde a los vendedores una ubicación de paradas en la que ya venía trabajando el concejal de Fomento Económico desde hace algunos meses, que da también respuesta a la demanda de los comerciantes ambulantes de reducir la distancia entre las paradas de ropa y las de alimentación, sin modificar en ningún caso la filosofía del mercado como “gran espacio comercial abierto” en la línea de “fomentar la circulación de personas por las calles del centro y potenciar de esta manera las ventas tanto de puestos ambulantes como de comerciantes locales”. A esta ligera reubicación de paradas en el arrabal del Carmen, que en cualquier caso se llevará a cabo manteniendo despejadas las puertas de la UNED o de la iglesia de los franciscanos, se le añade la disposición del equipo de gobierno a reducir la distancia entre paradas y a ampliar las dimensiones de los puestos de venta hasta los 12 metros.

Tanto Batalla como Benlloch han destacado la voluntad del equipo de gobierno de “llegar a acuerdos con todos los sectores cuando éstos sean posibles y no menoscaben el interés general de los vila-realenses, que estamos convencidos pasa por una recuperación del mercado en las calles del centro que permitirá volver a dinamizar e impulsar la economía local”.