La Guardia Civil detiene dos veces en tres meses a la misma persona por el robo de cable de cobre
La Guardia Civil ha detenido en San Vicente del Raspeig a un hombre de 37 años y a una mujer de 33, ambos de nacionalidad española, como presuntos autores de 15 delitos de robo con fuerza en las cosas, un delito de usurpación de inmuebles, un delito de defraudación de fluido eléctrico, un delito de desórdenes públicos, y 2 delitos de hurto, y está investigando a otros dos (españoles de 39 y 49 años), como presuntos autores de varios delitos de receptación, todos relacionados con el robo de 1.000 kilos de cableado de alumbrado público y de telefonía entre los meses de marzo y mayo.
El pasado mes de marzo, tras una investigación de la Guardia Civil de San Vicente del Raspeig, se logró detener a un hombre, de 36 años, como presunto autor de varios delitos de robo de cableado de cobre registrados en esta localidad.
A pesar de haber quedado en libertad provisional con cargos, según revela una nueva investigación de los agentes, este hombre ha decidido seguir con su actividad ilegal, y ha sido nuevamente detenido como presunto autor de nuevos robos cometidos en la misma zona, en prácticamente los mismos sitios donde había robado la vez anterior.
Sin embargo, tras la detención anterior quiso cambiar, y aunque continuó robando cable de luz y de teléfono, esta vez con hacía la ayuda de su pareja.
La pareja se dedicaba a escalar por los postes de teléfono para robar cable de telefonía y a sustraer cable de alumbrado de las arquetas municipales, que después quemaban o pelaban para extraer el cobre, y poder venderlo a dos chatarrerías de su zona de actuación.
De esta forma habían llegado a robar hasta 1000 kilos de cobre, del que consiguieron unos 2.500 euros, vendiéndolos en dos chatarrerías, aunque el coste del material robado y los daños producidos a consecuencia de ello, suponen más de 21.000 euros.
Además de los daños materiales que producían con sus robos, también causaban numerosos perjuicios en las zonas afectadas, dejando a los vecinos y usuarios sin luz, teléfono e internet durante varias semanas. En la zona, la partida alicantina del Moralet, y las carreteras de Agost y de La Alcoraya, existen numerosas personas de avanzada edad que tienen una dependencia vital de esos servicios, para comunicarse con teléfonos de asistencia y de emergencia.
Gracias a las pesquisas de los agentes de la Guardia Civil de San Vicente del Raspeig, se consiguió sorprenderles in fraganti, cuando se dirigían a vender el cobre, aún caliente tras haber quemado el plástico protector, por lo que fueron de nuevo detenidos.
La Guardia Civil les atribuye, además un supuesto delito de ocupación de inmueble y otro de defraudación de fluido eléctrico, en total una suma de 15 delitos de robo con fuerza del cableado, 2 delitos de hurto y 1 delito de desórdenes públicos por causar que la población se quedara sin servicio telefónico, por lo que han sido puestos a disposición judicial.
En cuanto a los dos hombres que les compraron el cobre durante estos dos meses, han sido investigados por un delito de receptación. Al parecer, los dos eran encargados de chatarrerías diferentes, y habrían comprado el cobre sustraído, en 78 ocasiones uno, y 19 veces el otro.
