La Universidad de Alicante y el Ayuntamiento de San Vicente ponen en marcha el programa Alojamiento Solidario para personas mayores
La Concejalía de Bienestar Social apoya la iniciativa por la cual personas que viven solas comparten su vivienda con universitarios a cambio de compañía
La Universidad de Alicante (UA) con la colaboración del Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig ha puesto en marcha el programa Alojamiento Solidario mediante el cual personas mayores o dependientes ofrecen alojamiento a universitarios en su domicilio a cambio de su compañía y colaboración en las tareas domésticas. El objetivo es evitar la soledad de los mayores y fomentar la convivencia con los jóvenes.
La concejala de Educación y Bienestar Social, Mª Ángeles Genovés, ha explicado que “este programa ofrecido por el Centro de Apoyo al Estudiante (CAE) de la Universidad de Alicante cuenta con la colaboración del Consistorio de San Vicente del Raspeig, que apoya la iniciativa facilitando información de personas mayores que viven solas o son dependientes y que pueden estar interesadas en compartir alojamiento con universitarios”.
La directora del Secretariado de Prácticas de Empresa y Apoyo al Estudiante de la UA, Josefa Parreño, dependiente del Vicerrectorado de Estudiantes, ha afirmado que “se trata de un recurso social no convencional en el que participan estudiantes de la Universidad de Alicante y personas mayores, personas en situación de dependencia funcional y mayores con cargas familiares en San Vicente del Raspeig”.
Con este programa se trata de prevenir o remediar situaciones de soledad de las personas alojadoras facilitando su integración social y, por otra parte, proporciona a los estudiantes la oportunidad de conocer las necesidades específicas de las personas mayores, dependientes y mayores con cargas familiares.
El Centro de Apoyo al Estudiante se encarga de coordinar el encuentro entre alojadores y estudiantes, en colaboración con el Ayuntamiento de San Vicente y los centros de salud del municipio. En este programa la persona que ofrece alojamiento no percibe remuneración económica y, a cambio, el estudiante, previo acuerdo, ofrece su compañía y colabora en tareas cotidianas.
