Los mercados municipales reparten 500.000 bolsas ecológicas entre sus clientes

La Unión de Mercados de la ciudad de Valencia, a través del convenio firmado con la Concejalía de Comercio y Abastecimientos y las subvenciones recibidas de la Conselleria de Industria y Comercio, ha puesto en marcha una nueva iniciativa en los mercados municipales, que consistirá en el reparto de medio millón de bolsas ecológicas entre sus clientes.

Se trata de bolsas con el logotipo de la Unión de Mercados y mercadillos de la ciudad de Valencia que están fabricadas por el producto “Oxo-degradable”, una sustancia degradante que las descompone a través de la luz sin dejar rastro en un tiempo aproximado de dos años.

La concejala de Abastecimientos, Mª Jesús Puchalt, ha destacado que “el reparto de bolsas de plástico por parte de los mercados de la ciudad entre sus clientes viene siendo algo habitual en los últimos años. Sin embargo, en esta ocasión cuenta con la novedad de que las bolsas que se están repartiendo son biodegradables, reciclables y reutilizables, lo que supone un esfuerzo de los mercados municipales por apoyar y trabajar a favor del Medio Ambiente”.

Puchalt ha calificado también esta promoción de muy significativa “ya que cada vez se hace más necesario buscar nuevas políticas y fórmulas de cuidado y respeto al Medio Ambiente. Los mercados municipales son parte fundamental en el desarrollo de nuestras sociedades y, por tanto, deben tomar buena nota y asumir un papel responsable y ecológico en la mejora del entorno. Estas bolsas pueden calificarse como amigables con la naturaleza, porque su composición permite que se degraden en un período de tiempo muchísimo más corto”.

Así mismo, la Unión de Mercados ha señalado que el reparto de estas bolsas surge de la necesidad de concienciar al conjunto de ciudadanos, también desde lugares cotidianos como los mercados y mercadillos, especialmente tras conocerse las conclusiones de los distintos estudios que se han realizado al respecto.

Según los citados informes, una bolsa de plástico convencional tarda cerca de 300 años en degradarse, mientras que las compuestas por “Oxo-degradable” lo hacen tan sólo en dos años, en caso de ser desechadas.