Cuatro días haciendo cola para hacerse con una entrada de la Batalla de Flores

No quieren quedarse sin entrada y están dispuestos a pasar cuatro noches para ver en vivo y en directo la tradicional Batalla de Flores que tendrá lugar este domingo en el paseo de la Alameda de Valencia. Desde este martes llevan haciendo guardia más de diez personas, tres grupos de fallas diferentes que han decidido compartir carpa, comida y espacio con un objetivo común: hacerse con uno de los codiciados palcos.

Ya han pasado la primera noche y aunque durante el día muchos tienen que trabajar, siempre hay alguien haciendo guardia. Esta mañana, Macarena, Yolanda y su hija Cristina eran las encargadas de ello: “Ha sido una noche entretenida”, comenta Yolanda. “Estás en la calle, la gente viene y te pregunta porque tienen curiosidad pero no tenemos problemas”, añade.

Yolanda hace guardia junto con su hija Cristina Marin, que ha decidido sacrificarse así “por fuerza mayor”, ya que este martes no pudieron hacerse con las entradas que salieron a la venta online por un problema informático. Estaba previsto que salieran 160 palcos a la venta pero no fue así ya que la totalidad (360) se vendieron por error la semana anterior, lo que dejó este martes a los compradores sin posibilidades de hacerse con una entrada.

“Después de lo que ha ocurrido no puedo quedarme sin entrada”, confiesa Cristina, que ha sido preseleccionada para la corte de honor por Duque de Gaeta. “Voy a salir en la Batalla de Flores y quiero que mis padres tengan un palco para poder verme”. “Vinimos por la mañana a hacer cola y más tarde nos enteramos que a pesar del error informático se sacarían igualmente 160 palcos más, pero ya estábamos aquí y decidimos quedarnos”.

Como Yolanda y Cristina, primera vez que hacen noche para conseguir una entrada para la Batalla de Flores, también hace cola Macarena. Pero ella tiene algo más de experiencia, diez años cumpliendo con la tradición familiar de pasar la noche a la intemperie por el deseado palco: “Excepto el año pasado los últimos diez hemos dormido tres noches en la calle para ser los primeros”, explica Macarena.

Y pese a las circunstancias lo llevan con alegría y con ganas de que abran las taquillas el próximo sábado. Hasta los operarios de limpieza del ayuntamiento se han unido a su causa: “Nos han traído bolsas de basura y mañana barrerán para que lo tengamos todo limpio”, bromea Macarena.