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Oftalmólogos y endocrinos unen esfuerzos en FISABIO contra la Orbitopatía tiroidea

  • Esta patología produce signos y síntomas oculares muy característicos, como la retracción del párpado superior ("ojos de asustado") y la proptosis ("ojos saltones")

La Jornada "Controversias en Oftalmopatía tiroidea. Manifestaciones clínicas. Manejo médico y quirúrgico", reúne hoy a 80 oftalmólogos y endocrinólogos de la Comunitat y del resto de país en el salón de actos de la Unidad de Oftalmología Médica de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (FISABIO).

20 ponentes, nacionales e internacionales, entre los que destacan miembros del Grupo Europeo de Orbitopatía de Graves (EUGOGO), especialistas de FISABIO-Oftalmología Médica y de los principales hospitales de la Comunitat, han abordado esta patología que aparece en más del 50% de los pacientes que sufren la enfermedad de Graves.

Al acto de inauguración, que ha estado presidido la Dra. Mercedes Hurtado, Presidenta del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Valencia, también han asistido Eloy Jiménez, Director Gerente de FISABIO, y la Dra. Amparo Navea, Directora Médico de FISABIO-Oftalmología Médica.

La enfermedad de Graves es la forma más frecuente de hipertiroidismo. Suele aparece entre los 30 y 50 años de edad y su incidencia es de 6 a 8 veces mayor en mujeres que en hombres. En las formas severas de la enfermedad, la relación hombre-mujer es de 1-4.

Además de causar un aumento del tamaño de la glándula tiroides, su manifestación ocular produce signos y síntomas muy característicos. Es lo que se conoce como Orbitopatía Tiroidea, la causa más frecuente de proptosis ("ojos saltones") unilateral y bilateral en adultos.

Los pacientes con esta patología pueden comenzar notando sensación de presión en los ojos, enrojecimiento ocular, lagrimeo excesivo y dolor en los movimientos oculares, especialmente al mirar hacia arriba.

"La retracción del párpado superior, que da un aspecto de 'ojos de asustado,' y la proptosis, es decir, los ojos 'saltones', son los dos signos más característicos de la enfermedad y se trata de cambios que desfiguran el rostro y alteran su fisonomía", destaca la Dra. Marta Pérez, responsable de la Unidad de Órbita de FISABIO-Oftalmología Médica.

"Muchas veces los pacientes son tratados con múltiples colirios para los síntomas que presentan, como si de una conjuntivitis alérgica se tratara, cuando en realidad nos encontramos ante una enfermedad autoinmune que afecta a todo el cuerpo y que necesita en su vertiente médica y quirúrgica la colaboración de diferentes especialistas", puntualiza la Dra. Amparo Navea, Directora Médico de FISABIO-Oftalmología Médica.

La incidencia de la Orbitopatía tiroidea resulta difícil de establecer, aunque se calcula que en Estados Unidos afecta al año a 16 mujeres de cada 100.000 habitantes; y a 3 hombres entre cada 100.000 personas. Extrapolando estos datos a la población de la Comunitat, se estima que pueden producirse unos 482 casos al año.

"Desde FISABIO hemos decidido promocionar e impulsar la Unidad de Órbita, en la que principalmente se atenderá esta patología orbitaria, que si bien no es muy frecuente, requiere de un abordaje y manejo multidisciplinar que implica a oftalmólogos, endocrinos y otorrinos", apunta Eloy Jiménez, Director Gerente de FISABIO.

La Orbitopatía tiroidea es la patología orbitaria más frecuente, pudiendo llegar a representar más del 50% de las visitas en una consulta especializada. Otras patologías que atiende la Unidad de Órbita de FISABIO-Oftalmología Médica son los tumores perioculares con afectación orbitaria, los tumores primarios orbitarios y las biospias orbitarias.

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