Un millar de vecinos de Benicalap protestan contra el nuevo centro Casa Caridad

Unos mil vecinos del barrio de Benicalap salieron ayer a las calles para protestar contra la construcción del nuevo complejo de Casa Caridad aunque en la pancarta de cabecera sólo se leía “No a la degradación” de una zona de la que ellos, en muy pocas ocasiones, han salido a protestar pero muchos sí llegaron hace pocos años a sus nuevas residencias de nuevo cuño. 

Ahora cuando la Asociación Casa Caridad emprende un nuevo proyecto para ayudar a los más necesitados estos vecinos de Benicalap salen a sus calles contra esa nueva construcción de una zona que, a pesar de la falta de más equipamientos, está mejor que hace 15 años.

Carteles y sábanas cuelgan de los balcones con leyendas como “Demasiado proyecto para un barrio” o “No a la degradación del barrio Stop Obras” y otros donde se podía leer “seis millones de euros en comida no en ladrillo” en clara alusión a que esa cantidad de dinero la debían destinar para dar de comer a unos necesitados.
A estos vecinos parece no haberles castigado ni la crisis ni el paro ni nada parecido porque su solidaridad es la siguiente: lejos de la puerta de mi casa.

Y mientras tanto Casa Caridad ha instalado una oficina de información en los terrenos donde tienen paralizadas las obras por la presión vecinal y la Asociación de Vecinos de Botánic y Cercle Obert de BEnicalap condenan sin paliativos la actitud de éste colectivo e insta al fiscal a intervenir y al arzobispo.