Novo: “El PSPV eliminó las unidades de ejecución en el PGOU’88 obligando al Ayuntamiento a expropiar”
Alfonso Novo responde a Vicent Sarrià
El concejal de Urbanismo, Alfonso Novo, en respuesta a las declaraciones vertidas hoy por el concejal del PSPV Vicent Sarriá, ha querido poner de manifiesto que “el PSPV con el PGOU de 1988 eliminó las Unidades de Ejecución anteriormente existentes con el antiguo Plan General y después no las incluyó con el nuevo planeamiento, esto abocó a la obtención de las dotaciones públicas únicamente mediante el mecanismo de la expropiación. Esta es la herencia socialista, que una y otra vez niega el Sr. Sarriá”.
Por ejemplo, en lo relativo a la Unidad de la Avda. Blasco Ibáñez, Gorgos y Rubén Darío, “fue el PSPV quien se la cargó con el PGOU de 1988 dejando la zona verde frente a la mezquita sin adscribir a ningún sector. El Gobierno municipal no ha anulado por tanto esta Unidad de Ejecución, ya se encargaron los socialistas, pero sí rechazó la alternativa técnica porque no era viable. Quizá si se hubiera aprobado, el Sr. Sarrià nos estaría acusando de haber favorecido los intereses de alguien” ha apuntado Novo.
Por otro lado, la Unidad de Ejecución Avda. Naranjos-Bulevar Serrería era una Unidad de Ejecución discontinua y esto no estaba permitido por la normativa urbanística. Aún así, la licencia para el Tanatorio se concedió porque las licencias son actos reglados no sujetos a la conveniencia o no de las administraciones, “lo que debería de saber el Sr. Sarriá”.
El edil de Urbanismo ha resaltado también que “al amparo de la LRAU la ciudad se ha desarrollado a través de PAIS que no estaban previstos en el PGOU de 1988, por los que la ciudad ha obtenido un gran número de dotaciones y de suelo dotacional de manera totalmente gratuita”.
Por último, Novo ha querido dejar claro que “el Ayuntamiento de Valencia siempre ha exigido a todos los promotores las cesiones que les han correspondido hasta el máximo de sus obligaciones y siempre ha resuelto conforme a los informes de los servicios municipales, y esto debería conocerlo el Sr. Sarrià pero, en su lugar, lo que hace es tergiversar la realidad mintiendo intencionadamente”.
