Sarrià exige a la alcaldesa que solucione de una vez el abandono de Bombas Gens
Los socialistas consideran que la alcaldesa está desaparecida y ha abandonado las tareas de gobierno
El concejal socialista Vicent Sarrià ha denunciado hoy que el desprecio de la alcaldesa por el patrimonio de los valencianos es preocupante y le ha exigido que por una vez anteponga los intereses generales a los de los propietarios de Bombas Gens y solucione el abandono de este importante conjunto fabril.
El Ayuntamiento reconoce la situación de degradación de la fábrica y acaba de imponer una sanción de 3.000 euros a la mercantil Geshabitat Urbana SA por infracción grave en materia de Sanidad, pero, tal como ha manifestado Sarrià, es incapaz de dar una solución definitiva, manteniendo las expectativas de negocio.
El Grupo Municipal socialista planteó en la revisión del catálogo de Bienes Estructurales de Valencia que se declarara Bombas Gens como Bien de Relevancia Local en su integridad y se dejaran de un lado los proyectos urbanísticos para construir un hotel, una residencia y un centro comercial con aparcamiento subterráneo, porque desvirtúa totalmente los valores patrimoniales del edificio.
Sarrià ha recordado que fue en el año 1994 cuando Geshabitat Urbana SA presentó este proyecto que plantea derribar prácticamente todo el edificio, sin que hasta la fecha se haya concretado, y por tanto todavía hay tiempo para rectificar y ha exigido al gobierno municipal que cumpla con el acuerdo de la Comisión de Cultura del año 2009 que aprobó la propuesta socialista de declarar esta antigua nave de manufacturas como Bien de Relevancia Local y adquirirla para usos públicos.
El concejal socialista ha recordado que el proyecto de 1994, muy criticado por los técnicos municipales, plantea reducir a escombros la fábrica de bombas Gen, obra de Cayetano Corso di Carminati, autor del Rialto y que supuso una introducción del Art Déco en València, para dejar como elementos aislados y anecdóticos parte de la fachada delantera y trasera.
Sarrià considera que con la sanción de 3.000 euros impuesta por el Ayuntamiento (se adjunta resolución) se está reconociendo el abandono de la fábrica y los riesgos sanitarios que provoca para los vecinos la suciedad acumulada y las permanentes ocupaciones que se llevan a cabo.
“A la alcaldesa se le hacen eternos los problemas de los barrios, lo que pone de manifiesto su permanente apatía y el desinterés por la ciudad “ ha matizado Sarrià.
