Esquerra Unida denuncia "la pasividad de la Generalitat y el Ayuntamiento ante la situación de abandono de la antigua estación de Carolines-Fira de Benimàmet"
La concejala del grupo municipal de Esquerra Unida, Rosa Albert, ha denunciado de nuevo la dejadez y la pasividad tanto de la Generalitat como del Ayuntamiento de Valencia a la hora de dar una solución a la situación de abandono en la que se encuentra la antigua estación de Carolines-Fira en Benimàmet así como las condiciones de inseguridad de la nueva y su entorno. El pasado mes de junio, a raíz de una moción que presentó EU en la comisión de Medioambiente, el equipo de gobierno del PP informó que la titular de la zona era la administración autonómica y en diciembre la propia consellera de Infraestructuras, Territorio y Medioambiente, Isabel Bonig, contesta a la diputada del grupo parlamentario d’EUPV, Marina Albiol, que FGV está programando los trabajos de limpieza.
“La realidad es que ya han pasado siete meses y los vecinos y vecinas de Benimàmet y los usuarios del metro a su paso por esta pedanía se siguen viendo obligados diariamente a transitar por una zona totalmente degradada y, sobre todo, muy peligrosa”, ha indicado Albert, quien esta misma semana ha visitado de nuevo, junto con afectados y afectadas de la pedanía, la situación de inseguridad en la que se encuentra este entorno.
La concejala ha apuntado que el soterramiento de las vías del metro a su paso por Benimàmet ha supuesto la consecución de una demanda histórica de los vecinos y vecinas de la pedanía. “Si bien es cierto que esta obra supuso una gran mejora, no menos cierto es que a día de hoy las condiciones en las cuales se encuentra no se corresponden en absoluto con el de una zona acabada, perfectamente urbanizada y totalmente accesible”, ha asegurado.
En concreto, en el entorno de esta estación podemos seguir encontrando las antiguas vías de la estación de Carolines-Fira convertido en un vertedero donde se depositan incontroladamente todo tipo de residuos que van desde cables de la luz hasta muebles abandonados, “elementos todos ellos peligrosos ya que pueden producir daños personales importantes”.
A todo ello, además, hay que unirle el hecho de que la entrada a la estación de metro de Benimàmet, cuya obra ha supuesto una inversión de 29’3 millones de euros, sea totalmente inaccesible y carente de cualquier tipo de seguridad. “Un paso de cebra inexistente a la salida del metro para cruzar una calle tan transitada como Felipe Valls, donde los vecinos y vecinas tienen que desplazarse unos cincuenta metros a cada lado si quieren cruzar en condiciones de seguridad, o bien jugarse la vida cruzando por la salida natural de la estación de metro. Esta es la realidad que se encuentran diariamente las ciudadanas y ciudadanos de esta pedanía en cuanto a la accesibilidad y seguridad se refiere”, según ha denunciado la concejala Rosa Albert.
Para la edil, “es intolerable que esta zona se encuentre en unas condiciones tan lamentables y, por ello, consideramos que el equipo de gobierno municipal debe exigir a la Generalitat que actúe de manera urgente en esta parte de la pedanía y haga accesible el acceso al metro de Benimàmet, así como que garantice la seguridad tanto de los usuarios y usuarias que utilizan este medio de transporte como de aquellos otros vecinos y vecinas que transitan por la zona”, ha concluido.
