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El recorrido íntegro de la Cabalgata de los Reyes Magos está protegido con vallas desde hace casi una década

  • El Ayuntamiento continúa extremando las medidas de seguridad de esta cita infantil, y subraya la importancia de controlar a los niños en todo momento

  • Se ha eliminado totalmente la presencia de vehículos de gran tonelaje, como los autobuses

El Ayuntamiento de Valencia ha velado siempre por la seguridad en la tradicional Cabalgata de los Reyes Magos con el objetivo de evitar accidentes que pudieran empañar el carácter festivo de esta cita. De hecho, desde hace cerca de una década se valla íntegramente el recorrido de la cabalgata, desde la salida de las primeras carrozas en La Alameda, hasta la llegada de los Reyes a la plaza del Ayuntamiento.

No obstante, desde las Concejalías de Fiestas y Cultura Popular y de Seguridad Ciudadana se recomienda a los padres o adultos que acompañan a los niños a contemplar este espectáculo anual, que no pierdan de vista a los pequeños y controles sus movimientos en todo momento, dada la aglomeración de personas que se concentran en torno al itinerario establecido. Además, se recuerda que ni mayores ni niños deben traspasar en ningún caso el tope que definen las vallas.

Tal como ha explicado el Concejal de Fiestas, Francisco Lledó, se ha instado a los carroceros a que protejan las ruedas de estos vehículos, de manera que se garantice más aún la seguridad durante el recorrido. Asimismo, se prevé que cada carroza participante disponga de personal de animación a los lados, con la doble función de hacer el espectáculo más vistoso, y vigilar los posibles incidentes.

También se ha optado por reducir la cantidad de caramelos que se lanza al público desde las carrozas, dado que la Cabalgata se presenta como un gran espectáculo de magia, ilusión, luz y color, donde lo que prima es el paso de las carrozas, actores, animales y bailarines. De hecho, se pretende también eliminar los juguetes de poco peso que tradicionalmente se lanzaban como regalos, dado que, por sus características, rebotan en el suelo y describen trayectorias difíciles de controlar.

En cualquier caso, los dulces que se ofrezca a los asistentes serán, como en los últimos años, sin gluten, de manera que puedan ser consumidos con toda tranquilidad por niños celiacos.

Finalmente, en la convocatoria de este año se ha anulado la presencia de vehículos de gran tonelaje, como autobuses de empresas o instituciones, en un intento de garantizar con mayor eficacia la seguridad de todos los asistentes a esta tradicional cita que reúne, cada 5 de enero, a niños y mayores por las principales calles de la ciudad.

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