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Felipe Garín: “El Consorcio de Museos mantiene la Sala La Gallera como el gran laboratorio del arte actual”

Felipe Garín: “El Consorcio de Museos mantiene la Sala La Gallera como el  gran laboratorio del arte actual”
  • La exposición estará abierta hasta el 29 de abril

El director del Consorcio de Museos de la Comunitat Valenciana, Felipe Garín, ha presentado la exposición ‘Julia Galán. Acha’ en la sala La Gallera de Valencia. Garín ha estado acompañado por la artista Julia Galán, y la comisaria de la muestra, Maite Beguiristain.

Según Felipe Garín “Julia Galán es una artista que trabaja en el ámbito de la instalación fotográfica en la línea de los proyectos que el Consorcio de Museos tiene reservados para la sala La Gallera”.

En este sentido Garín ha aseverado que “el Consorcio de Museos pretende mantener la Gallera como el gran laboratorio del arte actual mediante el desarrollo de exposiciones realizadas ex profeso para este espacio. Así a lo largo del año la sala acogerá el trabajo de tres artistas, dos de ellos valencianos, Julia Galán, Javier Velasco y Rebeca Plana”.

La muestra de Julia Galán inaugura la temporada expositiva con una obra que reflexiona sobre los diferentes roles que los hombres y las mujeres asumen impuestos por la cultura, la tradición, las normas o la religión. Acha es el nombre de una mujer africana que puede simbolizar a todas a las mujeres.

El proyecto consta de una instalación compuesta por seis vídeo-proyecciones de mujeres a tamaño real y otras tantas fotografías de flores mutiladas. Su trabajo debe ser interpretado como una única obra ya que según la comisaria, Maite Beguiristain “la exposición de Julia es una obra narrativa además de plástica porque siempre cuenta una historia”.

Según Maite Beguiristain “Julia Galán es una autora con una gran conciencia social que transciende a través de sus obras, lo que las convierte en piezas dramáticas y comprometidas. Dramáticas porque son narrativas y comprometidas porque denuncian. Y, siendo mujer, ambas características transcienden el evidente feminismo de sus imágenes”.

Julia Galán trabaja siempre en series donde el color juega un papel importante como elemento que enfatiza la acción. Sus denuncias son universales y atemporales. Cambia el momento, cambia el significado de la obra, pero permanece su significancia porque aquello que denuncia sigue existiendo como una lacra de la sociedad que no parece cambiar nunca.

Para la comisaria “Julia denuncia la cosificación de la mujer y la manipulación de su cuerpo para lograr una belleza artificial, construida con mucho dolor y sufrimiento, aquí simbolizados por la mutilación de las flores como metáfora de la ablación en las sociedades primitivas que, tras la globalización, ya no nos son ajenas, y el sufrimiento en pos de un supuesto canon universal que, en nuestra sociedad occidental, requiere mucho gimnasio, algo de cirugía estética y unas bonitas ingles brasileñas”.

Como metáfora última de la opresión social que eso supone sobre la mujer, la pelea de gallos. También ellos son adiestrados, contra su instinto, en este caso para la pelea en lugar de la sumisión, y también sufren de amputaciones, implantación de espolones y dolorosos adiestramientos.

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