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El Auditori viaja a los años 80 a través del espectáculo musical “Escuela de Calor”

El Auditori viaja a los años 80 a través del espectáculo musical “Escuela de Calor”
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    El Auditori viaja a los años 80 a través del espectáculo musical “Escuela de Calor” - (foto 2)

    El Auditori Teulada Moraira ofreció la tarde del sábado un espectáculo distinto y muy atractivo un viaje musical por lo mejor del pop-rock español a través de la música de “Escuela de Calor” y sus protagonistas Alberto Comesaña, del grupo (Amistades Peligrosas), Joaquín Padilla (Iguana Tango) y Pablo Perea (La Trampa).

    Con un decorado original que trasladaba al espectador a un estudio de radio dirigido por la actriz Paula Sebastián, hilo conductor de la trama, al convertirse en una locutora de radio que recuerda los gustos musicales, las tramas amorosas y las tareas diarias del medio radiofónico, en un claro guiño a éste como locomotora de la música durante la época.

    A través de los juegos de luces y una escenografía espectacular, los espectadores bailaron y cantaron piezas musicales de la movida madrileña a través de la voz de Comesaña, Padilla y Perea, míticas canciones de grupos como Burning, Nacha Pop, Los Secretos, Alaska, Radio Futura, Rosendo, Hombres G, Sabina, El último de la Fila, Gabinete Caligari, Amaral o Tino Casal, entre otros.

    En el escenario acompañando a los cantantes y en un lugar estratégico y poco usual, ya que estaban arriba del estudio de radio, se encontraba la banda compuesta por el reconocido batería y percusionista Trevor Murrell, fundador del grupo Wham, y que ha girado con artistas como George Michael, Sade, Joe Cocker o Mike Oldfield, y Toni Vázquez (Duncan Dhu y Radio Futura), al piano y teclados Pedro Roncero (Los Pecos, Pastora Soler), guitarra Borja Montenegro (Rosario y Sole Jiménez), guitarra Jorge Ojea (Luz Casal) y bajo Ricardo Esteban (La Trampa o Manolo Tena).

    Tras dos horas y media de concierto musical, los espectadores se entregaron al máximo al igual que todo el grupo de músicos, quienes bajaron del escenario varias veces para cantar distintas piezas musicales, finalizando el espectáculo en la entrada del Auditorio donde se ubicó el Photocall para tomarse fotografías con todo su público.

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