Maria Josep Amigó: «Resulta absolutamente necesario revertir la infrafinanciación»

La vicepresidenta de la Diputación de Valencia, Maria Josep Amigó, ha participado en las 'Jornadas Municipalistas por una Financiación Justa' celebradas en el Palacio de Congresos de Valencia, donde ha sido aprobada la llamada 'Declaración de Valencia'. Un documento avalado por un amplio número de alcaldes i alcaldesas de todo el Estado español en el que se insta al Gobierno central a reformar la ley que regula las Haciendas Locales y garantizar «un sistema de financiación estable» de acuerdo a su marco de competencias.

Maria Josep Amigó ha reivindicado que «resulta absolutamente necesario revertir la infrafinanciación que nuestros municipios están sufriendo». La vicepresidenta ha asegurado que «la 'Ley Montoro' nos tiene absolutamente ahogados y es por ello que se requiere su reforma inmediata o derogación para que los Ayuntamientos puedan disponer de los recursos necesarios para su progreso y prestación de servicios básicos de calidad».

Asimismo, Maria Josep Amigó ha lamentado «el corsé» que resulta esta norma legislativa, dado que «aunque los municipios acrediten superávit o seguir los principios de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera, no disponen de autonomía para acometer inversiones más allá de aquellas financieramente sostenibles, las cuales deben ejecutarse dentro de un mismo ejercicio o destinarse a sufragar deuda bancaria», ha indicado. «Unas limitaciones que impiden el progreso, la contratación de personal y hacer frente al gasto corriente». Es por ello, la vicepresidenta, en consonancia con la línea de trabajo marcada por el actual equipo de gobierno de la Diputación, ha abogado por «poner los recursos económicos en manos de los Consistorios, para que éstos puedan decidir qué proyectos implementan y en qué partidas invierten su dinero, favoreciendo la autonomía financiera de los Ayuntamiento», ha subrayado. En este sentido, ha puesto como ejemplos los diferentes planes provinciales habilitados por la corporación y el Fondo de Cooperación Municipal, que junto con la Generalitat, «permite acometer inversiones de forma incondicionada».

A estas jornadas han sido invitados los alcaldes de las 51 capitales de provincia y Ceuta y Melilla; así como de las diez ciudades con más de 200.000 habitantes que no son capital, como Vigo –donde su alcalde ostenta la presidencia de la Federación Española de Municipios y Provincias–; y los 39 municipios valencianos de más de 25.000 habitantes, como Elda, Torrevieja, Alcoy, Benidorm, Vall d'Uixó, Alzira, Ontinyent o Sueca; los alcaldes de cuatro localidades importantes de islas; y representantes de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias.

La alcaldesa de Sueca, Raquel Tamarit, ha apuntado a «la infrafinanciación y la falta de autonomía municipal» como las limitaciones que «restringen nuestra capacidad de decisión». Tamarit ha asegurado que la actual situación «constituye un fraude y supone un ataque frontal a la Administración Local bajo el pretexto de una normativa europea que, en realidad, resulta mucho más flexible». Es por ello, la alcaldesa de esta localidad de la Ribera Baixa ha reclamado «la necesidad de empatizar con la casuística que acredita cada Ayuntamiento para que podamos garantizar la prestación de los servicios públicos básicos». En relación a los acuerdos alcanzados en este encuentro, Tamarit ha destacado «la fuerza que aglutinamos un colectivo que representamos a 10,5 millones de personas defendiendo una postura común de mínimos que se inserta dentro del marco normativo actual».

Por su parte, el alcalde de la Pobla de Vallbona, Josep Vicent Garcia, ha indicado que «la problemática es compartida por todos los Ayuntamientos». Un modelo de financiación «que resulta injusto y no se encuentra acorde con los servicios y competencias que prestamos». Hecho el diagnóstico, Josep Vicent Garcia ha subrayado que «el momento de oportunidad es este, justo cuando se está abordando un nuevo modelo de financiación autonómica en el que se debería incorporar la negociación sobre un nuevo modelo de financiación local», ha afirmado.