Parroquias de zonas turísticas organizan actividades lúdicas y de formación para niños cuyos padres trabajan en verano
En Dénia, Xàbia y Oliva, y también para hijos de familias sin recursos
Parroquias de la archidiócesis de Valencia ubicadas en zonas turísticas organizan en los meses de verano actividades lúdicas para el entretenimiento y la formación en la fe de niños, cuyos padres y familias no pueden atenderlos por tener que seguir trabajando en julio o en agosto.
Así, la parroquia San Miguel Arcángel de Dénia fue la pionera en la archidiócesis en este tipo de actividades veraniegas, ya que lleva 20 años organizando su escuela de verano. Este año comenzó el pasado 24 de junio y finalizará el próximo 14 de agosto, y acoge a 200 niños de 3 a 12 años “de nuestra parroquia, de otras de Dénia, de familias que están veraneando aquí e incluso extranjeros”, según ha indicado hoy a la agencia AVAN el párroco, Miguel Gavilá.
Al frente de la escuela se encuentra un equipo de nueve monitores y cinco voluntarios de la parroquia que organizan, de manera altruista, de lunes a viernes por las mañanas, las actividades para los niños, entre otras “los deberes de verano y repaso de asignaturas, manualidades, baño en la pequeña piscina instalada en el patio de la parroquia y excursiones, además del momento de oración de cada día”, ha añadido.
También en Dénia, la parroquia de San Antonio de Padua ha puesto en marcha esta primera semana de julio una ludoteca a la que asisten 35 niños, de 3 a 12 años, “que acompañados por monitores realizan juegos, talleres de pinturas, adivinanzas, cuentos y excursiones”, ha afirmado el párroco Manuel Fontanet, que ha indicado que “ya llevamos ocho años organizando esta actividad en las que participan niños de familias de la parroquia, veraneantes y niños de familias desfavorecidas”.
Igualmente, la parroquia Nuestra Señora de Loreto de la localidad alicantina de Xàbia ha abierto esta semana las puertas de su escuela de verano, “que cuenta este año con 50 niños de 5 a 12 años, la mayoría vecinos de Xàbia cuyos padres están trabajando”, ha señalado el párroco, Fernando Mañó.
Esta iniciativa, llamada ´Verano en Parroquia', “es también una manera de no perder el contacto en verano con los niños que han hecho la catequesis durante el curso”, ha subrayado Mañó. Las aulas de verano, habilitadas en locales parroquiales, están coordinadas por monitores titulados de tiempo libre, muchos de ellos responsables de centros Juniors. Además de la oración, los deberes y el baño “los niños hacen gimkanas, rastreos y talleres de manualidades”.
Asimismo, la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora de la localidad valenciana de Oliva ha organizado hasta el 30 de agosto un campamento urbano similar al de Xàbia y Dénia, con actividades por la mañana que tienen como finalidad “el entretenimiento y educación integral de los niños y adolescentes” y que se realizan en la iglesia de Nuestra Señora del Carmen, cerca de la playa, según ha explicado el párroco, Fernando Cremades.
En el campamento colaboran monitores voluntarios y los niños que participan, “20 esta primera semana”, hacen actividades como “deberes, juegos al aire libre, excursiones y deportes”, ha comentado el párroco.
Por su lado, el colegio parroquial de San José, en Ontinyent, ha abierto, por quinto año consecutivo, una escuela de verano durante este mes de julio “a la que asisten alrededor de 40 niños que realizan juegos y talleres además de actividades para educarles en los valores cristianos”, ha explicado el párroco José Mª Payá.
