La Puebla de San Miguel inicia una repoblación selectiva de carrasca, quejigo, sabina albar y serbal
La Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente ha completado satisfactoriamente durante el mes de febrero la primera fase del Plan de Restauración diseñado para la reforestación de la Loma del Trillo del Parque Natural de la Puebla de San Miguel.
Se trata de la culminación de un proyecto preparado especialmente por la Conselleria para recuperar una zona de este espacio protegido de Ademuz que ya se intentó reactivar sin éxito hace más de diez años tras verse afectada por un incendio.
Ahora, desde febrero se consolida la reforestación mediante una plantación selectiva de las especies que antes del fuego formaban el bosque de la montaña, como la carrasca (Quercus ilex), el quejigo (Quercus faginea), la sabina albar (Juniperus thurifera) y el serbal (Sorbus domestica).
La Brigada de Conservación y Mantenimiento contratada por Medio Ambiente ha analizado y clasificado las áreas a repoblar según sus particularidades. El propósito es llevar a cabo la faena bajo cubierta, en el caso de las zonas donde ya hay una gran cantidad de especies vegetales que han crecido naturalmente; o bien, supeficialmente, donde la densidad de vegetación es baja, o amoldándose a la superficie de la tierra en las vaguadas, que requieren de un procedimiento distinto.
Previamente, en los dos últimos años que han precedido a la reforestación, el equipo de la Conselleria se ha centrado en acondicionar toda la zona de la Loma del Trillo. Y para ello se ha completado un arduo clareo del monte.
Los clareos y desbroces han mejorado el estado de salud de la masa forestal y eliminado la competencia entre las especies, lo que actualmente recpercute positivamente en que las plantas que se han introducido en el terreno prosperen. La capacidad productiva es fundamental para lograr que esta vez sí se consiga restaurar la última parte del Parque Natural de la Puebla de San Miguel que todavía no se ha repuesto completamente de las llamas.
